Haciendo el ridículo, mancillando la dignidad de España, los negociadores del PSOE y JUNTS, según cuentan algunas crónicas realizaron maniobras de distracción por la ciudad de Ginebra, para que los periodistas no conocieran, el lugar de reunión.
Nunca se ha visto tal cosa en una democracia avanzada como creíamos era la española, pero se ve que por unos buenos salarios y privilegios, algunos, están dispuestos a saltar todos los límites de la decencia.
Que representantes del PSOE, negocien con un prófugo de la Justicia, en un lugar secreto, con un mediador, experto al parecer, en negociaciones con la guerrilla, es uno de los hechos más preocupantes, desde el intento de golpe de Estado de Tejero.
La soberanía española, reside en el pueblo español y si un partido político negocia a espaldas a dicho pueblo y con una persona requerida por la Justicia, está sin duda, traicionando al pueblo español, que no ha sido consultado al respecto.
Por mucho que se intente “blanquear, lo que está sucediendo es de suma gravedad y debiera hacer intervenir a la Justicia, para frenar, lo que se quiere intentar en realidad: cambiar privilegios para unos pocos, por votos, para seguir gobernando.
La frustración e impotencia, que se está generando, en una parte de la sociedad, tendrá consecuencias muy negativas para la convivencia y la concordia.
No es de recibo, que unos “desalmados” jueguen con los destinos de todo un país por un mero interés particular.
Parece que quieren borrar del diccionario, las palabras decencia y verdad, dos significados que desconocen.
