Por un STV
La operación llevada a cabo por el Ayuntamiento de Santander, hace años, para modificar radicalmente el transporte urbano terminó en un fiasco.
Las protestas de los usuarios fueron de tal magnitud que el equipo de gobierno de Gema Igual anuló completamente lo previsto. Por supuesto, que en esta moda del ocultamiento, los santanderinos seguimos sin saber quiénes compusieron el equipo redactor del proyecto que firmo la Universidad de Cantabria.
Entre las novedades de la nueva forma pretendida para las líneas de transporte urbano queda un resto: El carril bus. La justificación de suprimir un carril para el uso de los santanderinos en coche era que todo el nuevo sistema del TUS se basaba en el eje Cuatro Caminos-Sardinero.
Una vez eliminado lo previsto por la UC ese carril carece de sentido y supone una restricción importante para el tráfico de vehículos.
La propuesta de Ciudadanos para regresar al viejo trazado de las líneas del TUS incluía la supresión del carril bus… pero han pasado muchos meses, algunos años y el carril bus permanece en la zona más conflictiva: Paseo de Pereda. ¿Por qué no se elimina? No será por cuestión de presupuesto ya que basta con borrar unas líneas de pintura en el asfalto.
Este verano, con muchos turistas en la capital, se percibe con más nitidez la urgencia de eliminar esa traba. Parece que la política municipal sea contra el automóvil y basta con un simple estudio para saber que los santanderinos quieren coche, porque el coche es libertad.
Los santanderinos de toda la vida recordamos los viejos “trolebuses” que, al ir propulsados eléctricamente – que ecologistas hace décadas-, necesitaban de unos cables para recibir la electricidad y, en consecuencia, circulaban como si fueran por un solo carril, ya que no podían salir del trazado de los cables.
El Ayuntamiento debería suprimir de inmediato el carril bus y repensar el carril bici que aleja los vehículos de la acera en el paseo de Reina Victoria y que entorpece mucho el tráfico.