Lo del pasado domingo ante el Barkaldo, colista del grupo, y la victoria por un contundente 3-0, parece que fue agua de borrajas tras lo visto ayer en Sarriena, donde el Racing caía derrotado por 1-0, ante un Leioa, que lograba su primera victoria de la temporada y que volvió a mostrar las auténticas carencias de conjunto cántabro cuando juega contra rivales que le presionan la salida del balón y le cierran bien los espacios.
Volvió a ve el Racing, de Laredo, sin ideas, superado por el rival que supo adaptarse mejor a las condiciones del terreno de juego, y lo más preocupante generando escasas ocasiones claras de gol en potería contraria a pesar de se el equipo con más presupuesto de la categoría como se aprobó el pasado sábado en la Junta General de Accionistas, con 3,8 millones de presupuesto para Segunda B.
Los racinguista volvieron a jugar a equipo pequeño, superados por su rival, optando por encerrarse en su campo y buscar balones en largo para Cedric o Bustos, con el fin de coger a a la contra al Leioa.
La segunda parte tuvo al Racing con algo más de protagonismo con la pelota, pero el conjunto vasco se mostraba bien armado y con las ideas muy claras de cómo debía jugarle al conjunto verdiblanco. Así cuando los racinguistas parecían tener el partido más controlado llegó el gol del Leioa, que dejó tocado definitivamente a un Racing que no supo reaccionar.
Oportunidad perdida para el cuadro cántabro se hubiera hecho con la cabeza de la clasificación con un partido menos y que ahora viajará este domingo a San Sebastián para medirse el filial de la Real Sociedad.