El Presidente de la Federación Española de Fútbol (FEF) Luis Rubiales, ha sido citado a declarar como imputado tras admitir el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 8 de Majadahonda la querella interpuesta por la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF) contra Luis Rubiales, presidente de la Federación Española, y Andreu Camps, secretario general de la RFEF, por presuntos delitos de coacciones, amenazas y prevaricación administrativa.
Rubiales tendrá que acudir el próximo día 29 de abril a las doce de la mañana a prestar declaración como investigado mientras que el secretario general de la RFEF, Andreu Camps e Iñaki Mikeo Etxarri, responsable del fútbol femenino, lo harán el próximo 18 de marzo.
La Asociación de Clubes de Fútbol Femenino acusa Luis Rubiales de realizar una «campaña de acoso y hostigamiento» hacia los equipos que forman la Liga Iberdrola con el objetivo de hacerse con la explotación de sus derechos audiovisuales.
Además, le acusan de utilizar estos mecanismos de coacciones para «tratar de hacerse con otros activos audiovisuales como los correspondientes al fútbol sala o a las competiciones de fútbol en la Segunda División B y Tercera División».
Según los denunciantes, el objetivo del Presidente de la FEF, radicaba en que los clubes femeninos «incumplieran las obligaciones contractuales asumidas, no dudando en utilizar para ello distintas y veladas amenazas, materializadas, además, en algunos casos, a través de la incoación e instrucción de distintos expedientes sancionadores de naturaleza injusta e improcedente, utilizados como medio de extorsión y, en otros, a través de la injustificada denegación de la concesión de subvenciones o participación en ayudas para el desarrollo de la actividad deportiva».