Dos hombres de 26 y 29 años han sido detenidos por la Guardia Civil, acusados de la violación de una menor de 16 años, producida en Revilla de Camargo hace 6 años.
Existe un tercer posible ejecutor, el cual no ha podido ser detenido por las autoridades cántabras debido a que se encontraba en Marruecos. Actualmente ya ha sido identificado, y al igual que los dos anteriores no tenía ninguna relación con la víctima, además de ser extranjeros todos ellos. No había nexo tampoco con la «estancia circunstancial» en la que se encontraban en aquel momento, apuntaba Luis Castillo, coronel jefe de la Guardia Civil .
Durante estos 6 años, diferentes especialistas han llevado a cabo innumerables investigaciones para poder encontrar a los brazos ejecutores del delito. Fue en la madrugada del 16 de julio de 2015, durante las fiestas de la localidad de Revilla de Camargo, y desde entonces la incógnitas han ido perdurando en el tiempo.
Hace dos meses, la investigación dio un giro, cuando se localizó a uno de ellos en el centro penitenciario de Mansillas de las Mulas (León). A raíz de ahí, se comenzaron a establecer a unos vínculos, a través de amistades que vinculaban al sospechoso con Cantabria. Dos de estas encajaban con las descripciones aportadas por la menor en sus declaraciones.
Poco después los guardias de Cantabria del Equipo de Delitos contra las Personas se desplazaron a Martos (Jaén) dónde se encontraba el segundo posible violador .La Guardia Civil apunta que, antes de su traslado a Cantabria, el hombre se encontraba «haciendo vida normal» .
El tercer protagonista de la trama, se encuentra en Marruecos y las autoridades han transmitido que «hasta donde nosotros constancia, está ingresado en un centro penitenciario de ese país cumpliendo condena por un delito relacionado con el tráfico de drogas «.
El coronel jefe de la Guardia Civil, ha explicado que ninguno de los implicados «estaba desarrollando una vida habitual en Cantabria», por lo que dicha circunstancia ha complicado el devenir de la denominada ‘Operación Fez’.
