El Partido Popular (PP) votará a favor de la Ley de Seguridad Nacional que el Gobierno de Pedro Sánchez, presentará el el Congreso de los Diputados para su aprobación, según ha asegurada la portavoz de los populares, Cuca Gamarra, a pesar del «insulto» constante del Presidente del Ejecutivo para dirigirse a su partido que «enrarece mucho el clima político».
Gamarra, ha reprochado a Pedro Sánchez que «insultar mucho» a su partido, este pasado miércoles en la sesión de control al Gobierno, en el Congreso de los Diputados. en lugar de ofrecer «información a los españoles» en sede parlamentaria sobre los interrogantes abiertos en el llamado ‘caso Pegasus’.
«Evidentemente utilizar el insulto por parte del presidente del Gobierno para dirigirse al adversario político no es el camino de lo que España y los españoles merecen», ha señalado la portavoz del PP, añadiendo que «el presidente del Gobierno debiera replantearse cuál debe ser la actitud de un presidente hacia el principal partido de la oposición y la alternativa en el Gobierno», mientras que parte del PP hubo «contundencia» ante la situación pero «no hubo ni un solo insulto» ni «descalificación».
El PP tiene claro que «esto no es lo que merece España. España merece otro presidente del Gobierno y que haga del respeto la manera de gobernar también», ha dicho Gamarra, aunque «no significa que el PP no vaya a estar a la altura de lo que el país merece y necesita».
«Somos un partido de Estado y actuaremos siempre como un partido de Estado en la toma de decisiones», señala la portavoz popular, en relación al debate de la Ley de Seguridad que se celebra este jueves en el Pleno del Congreso con enmiendas de totalidad de ERC y Junts, ya que entienden que es una ley «necesaria» porque deben «seguir desarrollando todo lo que tiene que ver con la Ley de Seguridad Nacional».
Ante esta situación el PP actuará como «un partido de estado» y votará en contra de esas enmiendas a la totalidad y así pueda continuar su tramitación parlamentaria y que así «el Gobierno entienda que solo puede abordar los asuntos de Estado con el principal partido de la oposición» y que Sánchez, entienda que no puede «tener como socios, rechazando al PP, a aquellos que lo único que buscan es debilitar constantemente al Estado».
