En agua de borrajas se ha quedado la querella interpuesta en su momento por la Asociación para la Conservación del Lobo Ibérico (ASCEL) y WWF contra el la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, que dirige Guillermo Blanco, por las ordenes de caza del lobo autorizadas el pasado mes de junio, al decidir la Fiscalía archivar la denuncia.
Esta decisión ha supuesto que desde la propia Consejería de Medio Ambiente, ya se esté preparando nuevas órdenes de extracción de lobos, como así lo manifestado el consejero, Guillermo Blanco, tras conocer la resolución de la Fiscalía.
En la denuncia presentada pro ASCEL y WWF, estaban implicados el propio consejero, Guillermo Blanco, el director de Biodiversidad, Medioambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio, así como el directo de Medio Natural, Ángel Serdio, por prevaricación y falsedad documental.
Las órdenes de extracción de lobos publicadas en su momento, se encontraban paralizadas por la Justicia hasta que la Fiscalía tomase una decisión, algo que ha sucedido de forma positiva para el Gobierno de Cantabria, que tras esta resolución ya anunciado que en las próximas fechas publicara nuevas órdenes de extracción de lobos, y que abre la puerta al resto de comunidades autónomas que tienen el mismo problemas.
