Hace un par de semanas se cumplió un año desde las anteriores elecciones y los que ven mi muro habrán observado que han sido escasísimas las cosas que he compartido o comentado sobre política porque a aquellas elecciones del 2023 llegué tan asqueado de todo que ni a votar fui.
Sin embargo ha llegado un momento en el que siento la necesidad de plasmar por escrito de forma pública lo que me bulle en la cabeza ante esta política de «todo vale».
Según el presidente Sánchez también conocido como Mr. Handsome o El Guapo, todo aquello que era anticonstitucional, totalmente imposible y no se cuantas cosas irrealizables mas, por aquello de hacer de la necesidad virtud se acabó plasmando en una ley vergonzosa en la que el estado le pide perdón a los que delinquieron contra él: me estoy refiriendo como habrán adivinado a la infame Ley de Amnistía.
La necesidad en este caso se llamaba 7 votos y la virtud, dudosa virtud, es la de que no haya límites a la hora de mentirle a todos los españoles o de quebrantar la palabra dada hasta el punto de que si nos quedaba alguna duda, para finales del ´23 todos tuvimos claro que este presidente no conoce límites en cuanto a mentir para seguir en el poder. En esa forma de proceder le siguieron todos los miembros del gobierno que también tienen una hemeroteca digna de revisarse en cuanto a declaraciones sobre la imposibilidad e inconstitucionalidad de la amnistía, igual que el presidente.
Voy a citar las razones básicas que arguyó y que repitieron como loros sus ministros y los tertulianos más acérrimos: “La amnistía cierra definitivamente el procés, termina el conflicto político” y atrae a los partidos indepes a la política española, la “realpolitik” por así decir, además de dar estabilidad a la legislatura y permitir la aprobación de los PGE para el 2024”
Frente a esto, ¿qué pasó realmente?: Lo primero de todo fue que Puigdemont, un personaje que estaba totalmente amortizado y del que no se acordaba nadie y que incluso había perdido ya la inmunidad como europarlamentario de repente por obra y gracia de Pedro Sánchez salta a la palestra y se convierte en árbitro, protagonista y héroe catalán, a ERC en Cataluña le tumbaron sus presupuestos, hubo elecciones en Cataluña, no se aprobaron los presupuestos en España y los partidos indepes retomaron con nuevos ímpetus su agenda indepe situando ya en el punto de mira futuro lo único que les queda, ósea el referéndum de autodeterminación, del que también hemos escuchado a Sánchez y sus colegas de gobierno que es imposible e inconstitucional ¿les suena?
De esto anterior yo niego la mayor, el supuesto conflicto político lo ha resucitado Sánchez dándole el protagonismo a Puigdemont y accediendo a empezar a negociar la amnistía que finalmente se acabó aprobando, antes de eso y desde la entrada en vigor del 155, el suflé en Cataluña se había bajado como cae un castillo de naipes e insisto, el independentismo estaba en sus horas mas bajas en muchísimos años y así fueron sus resultados electorales.
Y llegamos a estos días de este verano, cuando el 15 de julio la Vicepresi 1ª y Ministra afirma tajantemente (como muchos otros antes de ella, incluido el presidente Sánchez) que no era admisible legalmente un pacto para el cupo catalán y dos semanas después está firmado para investir a Illa como President.
Hasta los cojones de mentiras y de concesiones sin limites, sin unos mínimos de decencia y respeto a lo comprometido en promesas de campaña y en programas políticos, NO PUEDE SER QUE NADA DE LO DICHO VALGA, NO PUEDE SER QUE NO HAYA NINGUN LIMITE, ESTO ES UNA VERGÜENZA ,el conseguir mas escaños en una investidura no puede ser a cualquier precio ni a costa de entregar literalmente el estado. NO PUEDE SER.
Nos merecemos unas elecciones generales YA.
