No tengo muchas ganas de pensar en política así que me he tirado por las «socialités»…..
Ahora que se ha muerto Marta Chavarri, me ha dado por recordar cosas de los ochenta cuando teníamos dos pijas nacionales, ella e Isabel Preysler…
Las dos se casaron con dos marqueses hermanos, una con el de Cubas, y otra con el de Griñón……
Hasta ahí igualadas…..
Pero, mientras una era increíblemente paleta, hortera, lujo exhibiente y sonrisa eterna Profidén, la otra tenía la gracia, pues hay que reconocérselo, de que pareciera que todo le importaba un pimiento…..
De ella pensabas, hay que ver, va de trapillo y que bien le sienta….
Es que no es trapillo ….
Ahhhhhhh…
Ese era el secreto …
Se enfundaba unos vaqueros que no se vendían en ninguna parte, bueno sí, en Londres y sólo a ella, una botas camperas y un bolso al hombro y un tufazo de elegancia impregnaba la escena…Luego te enterabas que sólo el bolso valía dos millones de pesetas, la entrada para un piso de un profesor de biologia…
La otra, la china, cargaba con todos los escaparates de Serrano encima y parecía lo que es: una señora alicatada hasta el techo…. No me extraña que la eligieran para vender azulejos….
La una salió rebelde y respondona y prueba de su rebeldía es que se apartó de la vida pública, no la aguantó más….
De la otra, se duda que tenga otra vida que la pública, se encuentra “entre maridos”…
Con su pan se lo coman, las dos… ¡Qué vida más sin sustancia!
Dos floreros de esos que les gustan a los «señoros» de la derecha…
Para ellos, las mujeres se dividen en tres: como éstas, como sus chachas y las del puticlub….
Existen también las feminazis, pero esas “tienen los días contados como ganemos”, presumen en la cafetería del Club de Campo….
Ahí se les atragante la bolita….
Mañana más….
Coco Bari ©©®