A veces hay que enseñar a las nuevas generaciones que la vida no es un camino de rosas……
“Tienen derecho a sus sueños”. Claro que sí….. ¿Qué quiere usted ser de mayor? Cantante de ópera.
¿Sabe usted cantar? No
¿Tiene cualidades? No
“¿Tengo por eso que abandonar mis sueños?
No
¿De qué piensa usted vivir?
¿Qué es eso de vivir?
Pagar un alquiler y el recibo de la luz, y el de internet y comer…
“Yo como cualquier cosa, por mis sueños”, pues siga sus sueños…
¿Ha hecho usted muchas audiciones? Si
¿Le han contratado? No
¿Qué cree que pasará en el futuro?
No se sabe.
Hay gente que ya sabe lo que le va a pasar sin experimentarlo y otra que no…..
Yo, para saber si el río tiene agua, me tengo que tirar de cabeza…
¿Y si te arrastra la corriente?
Ya lo veré entonces.
Muy respetable.
Hay otra gente, de la misma edad, con la misma experiencia que mira el río desde el puente y dice: yo ahí no salto.
Todo muy respetable.
A veces la vida te da segundas oportunidades, otras veces no. Te tiras, te lleva la corriente y acabas en el océano, como Pinocho, en el vientre de una ballena…
Pero tienes el derecho a intentarlo
Y otros el derecho a decir: allá tú, conmigo no cuentes.
Estas cosas las enseñaban antes en las escuelas, o el abuelo mientras tomaba el sol en el banco, o en la plaza del pueblo.
Ahora la escuela enseña informática, el abuelo está en Ibiza, con el IMSERSO y lo más parecido a la plaza es el muro de Facebook.
Mi generación aprendió a escuchar las voces interiores que alertaban de lo que no iba a funcionar….Lo decían, lo decían, hasta que les hacíamos caso…
O hasta que acabábamos llorando y entonces las reconocíamos…
Ahora se sabe mucho…. Tanto, que se cree que no hay nada que aprender…. Y eso no se aprende….
Antes, unas generaciones enseñaban a otras… Ahora, unas se cansaron de no ser escuchadas y otros creyeron que estaba todo en Google…
Allá cada uno…
Coco Bari ©©®