Anoche, en la catedral del futbol, el estadio de Wenbley, el Real Madrid conquistaba su decimoquinta “Champions” (Copa de Europa), noticia que excede a lo deportivo, especialmente en España y en Europa, para trascender a la categoría de notica general.
Lo que en su día hizo este Club, primordialmente en los años 60 del Siglo XX, conquistando casi cinco copas de Europa seguidas, en las que participó nuestro genial Paco Gento, ayer igualado, con seis copas en sus vitrinas, además de otros títulos, fue algo que no pasó desapercibido, y se decía que era el equipo del “régimen”.
Sin embargo, esta institución se ha venido reinventando en los últimos años y ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos, consolidándose también en el Siglo XXI, en lo que a resultados se refiere, como el “mejor Club de Futbol del Mundo”, a pesar de los importantes cambios que se han producido en el deporte en general y en el futbol en particular, como en las reglas, técnicas, material, en lo mediático, pero especialmente en lo económico con la irrupción de los “petrodólares» o de “oligarcas rusos y chinos”, primero en Inglaterra con el “City” de Abramovic, o el PSG, que como decía el gran Cruyff, solo tenían que abrir el grifo para hacer los mejores fichajes del mundo.
Pues bien, a pesar de todo ello, el Real Madrid sigue ahí, como martillo pilón, y se acaba de consolidar definitivamente y de manera indiscutible e incontestable como el Rey de Europa en toda su historia, amenizado todo ello con la remodelación del Bernabeu (futuro Florentino Perez), proyectando su imagen incluso eventos extradeportivos, como acabamos de ver con el concierto de Taylor Swift, o el previsible escenario de Topuria.
Lo curioso del caso es que está obteniendo todos estos logros sin un patrón de juego propio y definido, no muy atractivo ni bonito, cuyos ingredientes son, por supuesto la calidad de sus jugadores (aunque este año hay una docena de equipos con mejor plantilla), pero sobre todo el su implicación con el escudo, como decía su Presidente, el pundonor, la verticalidad, y la “suerte” de San Ancelotti, pues este año el madridismo ha sufrido más de la cuenta, aunque se ha visto finalmente recompensado, entrenador que no me gusta pero algo tendrá pues los resultados le avalan en distintos clubes
La guinda, en mi opinión, seria tener un sistema de juego atractivo, como tuvo en su día el Milan de Sacchi (Ancelotti no lo absorbió) o para mí el mejor estilo de juego el “4-4-3” de R. Michels en el Ajax, desarrollado y mejorado por el mejor genio que ha dado el Futbol (en su más amplio sentido) como fue Johan Cruyff (solo le faltó un Mundial para ser considerado como tal), que fue capaz de ejecutar el mismo plan como futbolista y como entrenador. Prueba de todo ello fue el dominio del Barsa durante la etapa Guardiola con el Dream Team liderado por Messi, herencia futbolística de Johan, promotor no solo del estilo de juego sino de la cantera (Masia) iniciado por el propio Cruyf, seguido por Rijkart, Guardiola, aunque Xavi (por su mal carácter) no ha sabido gestionarlo adecuadamente.
El (o la falta de) patrón de juego es la única carencia del Real Madrid, pero la fórmula funciona en todos los sentidos. Enhorabuena al madridismo y a España, porque contribuye a fomentar la Marca y es reflejo de nuestro carácter.