En ocasiones, las preguntas más difíciles, son las más simples.
¿Qué Hacer Con Nuestra Vida?
¿Qué decisiones tomar? ¿Qué rumbo debo escoger de ahora en adelante?
Y se hace difícil contestar a una pregunta que debería ser muy sencilla, debido a que muchas veces nosotros no somos quienes tenemos el control sobre nuestras vidas, entonces decidir que hacer con ellas es algo que parece extremadamente complejo.
El no tener control sobre nuestra vida es perfectamente normal, y ocurre en la vasta mayoría de las personas, pero esto no debería ser así.
Cada quien debería poder controlar y decidir con determinación lo que quiere hacer o dejar de hacer, lo que quiere lograr, a lo que se quiere acercar y de lo que se quiere alejar.
De adolescentes nos enfrentamos a la crucial pregunta:
¿Debo estudiar lo que me gusta? o más bien lo que más está generando ingresos ahora… lo que más me “conviene”.
Normalmente se cuenta con la presión de los padres, amigos y familiares.
Esta presión es suficiente como para cambiar la mentalidad de un adolescente, y hacerle pensar que lo que Le Gusta, no “vale la pena”. Muchos abogados quisieron ser músicos. Muchos Ingenieros quisieron ser artistas, psicólogos o cineastas.
Muchos cuando pequeños quisimos ser…..(yo bailarina….luego vivir como Cousteau…en el mar , entre peces y mares), pero se nos metió en la cabeza que era imposible, que no valía la pena…
Esta claro, nuestro mundo no está funcionando como debería.
Desde niños, se nos enseña a no soñar, a no hacer lo que queremos hacer ni a lograr lo que queremos lograr. Y está bien recibir consejos de quienes han aprendido, de quienes han obtenido experiencia en su vida, pero esto no tendría porque afectar las aspiraciones de las personas en el largo plazo.
El hecho de que alguien considere una decisión buena o mala desde su punto de vista, desde su propia visión de la realidad, no significa que yo deba tomar una decisión basada en esa visión debido a que no tengo alternativa de pensar.
De hecho, es un buen momento para decir, que estaría perfectamente a gusto, si alguien cuestionase mi visión del mundo con argumentos, y me hiciera saber que lo que digo no tendría porque influir en su vida tal y como la desea. Eso sería excelente, un gran punto de vista, una gran determinación y sobre todo, vendría de alguien con agallas.
Muchas personas cuando se sienten cuestionadas acerca de su vida, empiezan a dar por sentado que quienes lo mencionan tienen la razón, muchas veces aprendemos, o creemos que aprendemos cosas, simplemente por dominación de pensamientos, y no por adquisición cognitiva de experiencias de aprendizaje.
Creo que para todos nosotros es claro ahora que no deberíamos dejar que nadie intervenga en nuestras vidas, a menos que sepamos con certeza que la intervención tendrá frutos beneficiosos.
Entonces… ¿Qué Hago Con Mi Vida?
Puedes decidir muchas cosas que hacer con tu vida, pero lo más importante es que lo que no debes hacer con tu vida, es dejar que sea otro quien decida por ti, no deberías permitirle a nadie tomar el control de tu destino, de tu futuro, de tu felicidad.
La felicidad la podemos encontrar, haciendo las cosas que realmente nos gustan.
Personalmente yo no vería como parte de mi felicidad, levantarme todos los días, y dirigirme a un lugar en el cual no quiero estar, a hacer algo que realmente no me gusta hacer, pero que debo hacerlo por necesidad. Eso sería esclavitud disimulada.
No dejes que tu vida caiga en la rutina y que funciones a piloto automático, enfócate en tomar decisiones basado en tus deseos, en tus sueños, no importa si estos son muy ambiciosos o parecen imposibles.
Nunca dejes de soñar ….
Coco Bari ©©®