Hubo un tiempo en el que no había mensajes, pero había miradas que lo decían todo con los emoticonos de nuestros gestos, risas estados enfados …..
Un tiempo donde no existían los likes, pero la gente se conocía y se saludaba por las calles, paseaba por la vida sin máscaras.. y donde todo era más real, más sano, menos dudoso….
Hubo un tiempo donde el consejo de un padre o una madre era mejor que cualquier búsqueda en Google y la historia de un abuelo era más cierta que cualquier referencia en Wikipedia, al menos en mi caso, mi abuelo me enseñó biología, a cocinar y amar los animales cada verano que pasaba en Santander, al tiempo que pasaba horas en su biblioteca leyendo todo tipo de lecturas, tanto prohibidas como aconsejables…..
Hubo un tiempo donde no existía el correo electrónico, ni el Whatsapp pero recibías notas, postales y cartas de amor, porque las cartas de odio o dolor apenas tenían pulso….la paciencia y el saber esperar respuestas al silencio nos hacían más humanos y más confiados, creíamos más y dudábamos menos, íbamos despacio y serenos por el camino de la verdad y ahora nos aceleran las prisas y las mentiras de dobles vidas camufladas en teléfonos que se rompen, que se ahogan, baterías que se acaban, sueños repentinos, y faltas de red en la ratonera del juego sucio….
Tiempos donde nadie te insultaba escondido en el anonimato de una red social, y era la barra de un bar, una cafetería, lugares donde se discutía con argumentos, con respeto y compartiendo un vino o un café, o una borrachera para olvidar o recordar ….
Hubo un tiempo en que la gente no aparentaba lo que no era, donde no existía el photoshop, ni los filtros y eran los años los que se encargaban de dibujar las arrugas y no quitarlas como ahora para sembrar una falsa juventud arañada y envasada por dentro…
Si, añoro aquellos tiempos donde todo era más sencillo, más de verdad y nos vibraba el corazón y no el puto teléfono, verdugo éste de las relaciones que se mantienen en la distancia a ojos ciegos y con la única consolación de creer sin ver…..
Hubo un tiempo donde se vivía con exceso de confianza y se valoraba todo porque se sabía que lo bueno no abundaba, ahora impera el exceso de desconfianza porque nadie valora nada y lo mediocre siempre impera y se suelta con más facilidad que se toma…..
Coco Bari ©©®