Por Marcelino Pérez
Tras el éxito de las elecciones municipales y regionales el PP tenía ante si un panorama triunfante, nada menos que el gobierno regional y la posibilidad de contar con el apoyo del gobierno de España. Todo se frustró cuando en las elecciones generales el PP no logró la mayoría suficiente para gobernar la nación.
Con el actual horizonte el PP se enfrenta a un futuro incierto. Estará en la oposición y deberá adaptarse a ese papel. Feijóo tenía ya formado su gobierno, repartidos los cargos y ahora tiene que dar un golpe de timón para ser líder de la oposición.
La amarga victoria de Feijoo ha abierto un serio debate dentro del propio PP y, sobre todo, en el entorno económico y social del partido. La pregunta es clara ¿es Feijóo el político que necesita el PP para alcanzar el gobierno?. Muchas voces cuestionan al gallego que parece no ser capaz de enfrentarse con decision a un partido socialista cada vez más próximo al independentismo.
Columnistas de prestigio denuncian el hecho de que el presidente del Senado, con el PP con mayoría absoluta, se admitan como válidos los textos utilizados por senadores a la hora de acatar la Constitución. Y, sobre todo, se duda del equipo de Feijoo diseñado para gobernar u no para la oposición.
El propio Feijoo esta decidido a convocar un congreso extraordinario para fijar su posición respecto a VOX y armarse ante un largo periodo en la oposición. Un congreso que puede ser también el fin del liderazgo de un político bien intencionado pero incapaz de enfrentarse con decision y contundencia a un PSOE dispuesto a seguir gobernando a cualquier precio.