Por la importancia del momento reproducimos la opinión editorial de la Agencia HerQles sobre la polémica suscitada con el caso Rubiales y el beso a la jugadora Jenni Hermoso.
Por ʜᴇʀQʟᴇs, @herqles_es
El caso de Jenni Hermoso es especialmente sensible para todos los hombres por el peligro que entraña eso de retirar el consentimiento con retroactividad. La jugadora constató su conformidad con el beso de Rubiales en el momento en el que afirma en COPE que fue «una anécdota sin importancia» y bromeó abrazada a Rubiales sobre su boda. Sin embargo días después retira esa conformidad con el beso y acusa a Rubiales de «agresión sexual».
Este precedente, llevado a su desarrollo último, puede permitir que tu ex-novia retire su consentimiento sexual con retroactividad tras una discusión y te acuse de violación o que una desconocida en una discoteca con la que tuviste un lío te acuse al día siguiente de agresión sexual.
Este caso ya no trata de Rubiales y la RFEF. Este caso trata de los derechos de los hombres, porque independientemente de que la actitud de Rubiales haya sido ciertamente cuestionable desde una óptica de decoro, la jugadora consintió.
Por fin, alguien se da cuenta de que va todo èsto, como he escrito en otras ocasiones, cuando han violado y empalado a mujeres brutalmente, no he escuchado nada por parte de todas estas pedorras y eso si que es grave, gravísimo.
No podemos permitir que se salgan con la suya