Por un STV
Si se realizara un informe, para conocer cuantos millones de euros se ha gastado el
ayuntamiento de Santander en cambios en las aceras, quedaríamos asombrados. En
Santander se cambian las aceras por simple decoración y se gastan unos fondos que
son un verdadero despilfarro.
La última reforma ha sido la de la calle San Francisco. El firme de esa calle peatonal y
comercial estaba en perfectas condiciones, pero se ha levantado completamente para
adornarla con unas losas más bonitas… y más caras.
En muchas de las grandes capitales del mundo las calles más importantes están sin
esas caras baldosas, simplemente en Londres o Nueva York las aceras están asfaltadas
como si fueran una carretera. Con esa política demás de un ahorro en la construcción
se reducen los gastos cada vez que es necesario levantar la acera para soterrar una
nueva tubería o reparar un desperfecto.
Las calles de Santander tienen aceras de verdadero lujo, con losas haciendo dibujos
que cuestan una fortuna y que con el paso del tiempo deben ser levantadas para
realizar obras de reparación y mantenimiento.
Una buena política sería no gastar tano en adornos y reducir los impuestos a los
habitantes de la capital. Quizás algún partido político tome esta idea para su campaña
electoral.
