De esta experiencia que estamos viviendo y de la que no sabemos cuando se nos va a pasar el shock, rescato dos hechos:
- El primero es el del camionero que, en medio de la inundación VE gente en situación difícil, en la calle, con el agua creciendo y les abre el remolque de su camión.
Allí se metieron más de treinta personas y entre ellos varios niños.
Y salvaron su vida…
2. El otro es una academia de inglés en un bajo, donde estaban dando clase. Los profesores dijeron a los alumnos que subieran a los pupitres, pero viendo que el agua alcanzaba ya un metro de altura, salió uno de ellos, rompió la puerta del edificio de al lado y los fueron sacando, protegiendo , haciendo una cadena, y ya en el otro portal, solo tenían que subir las escaleras, para salvar su vida.
Si el camionero se hubiera quedado en su cabina, donde estaba a salvo, hablando por teléfono: “socorro, socorro que sube el agua” , se hubiera salvado él pero nadie más.
Tuvo un timbre interior, una intuición que le dijo que mirara alrededor a ver si podía ayudar.
El profesor de la academia podía haber sido miedoso, temer el romper ninguna puerta, no correr el riesgo a equivocarse y “a ver si me la cargo”. Si hubiera sido una persona con miedo a equivocarse, posiblemente no se le hubiera ocurrido la idea de romper la puerta de un vecino…
Salvó unas cuantas vidas y además la suya.
Contrastan estas actitudes. La del camionero con Mazón, a quien no se le encendió timbre alguno. No tiene timbre creo. No tuvo la intuición de que podía ser necesario. No fue capaz de mirar alrededor. Tenía el poder, había competido en unas elecciones para tenerlo, lo quería, pero no supo usarlo
La del profesor de inglés con la consejera de la Generalitat. Esta vio el peligro pero no quiso tomar decisiones. “A ver si me la voy a cargar. Mi carguito, mi carguito” y se tiró horas intentando localizar al único que según su percepción de las cosas, podía tomar decisiones. Y como no lo localizaba, siguió intentando, intentando,intentando… Y así pasó el tiempo.. Intentando…
Si hubieran dicho “alarma, ya!” a las tres de la tarde, cuando decidió convocar la reunión “para ver qué se hacía “, porque ya estaba siendo consciente del peligro, se hubieran salvado muchas vidas. A lo mejor no todas, a lo mejor 150 de los más de 200 muertos. Vete a preguntar a esos 150 qué hubieran preferido..
Uno dijo: “no pasa nada” me echo la siesta ….
Y la otra: “no importa lo que pase siempre que pieda demostrar que no tuve la culpa”…
No es tiempo de reproches, dicen….Pero, si no reflexionamos ahora, cuando estamos con el dolor y la rabia, ¿cuándo?
Que hable la Justicia, cuando tenga que hablar .
A tomar decisiones deberíamos aprender también, desde niños entre la casa y la escuela….
Coco Bari © © ®