El Presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, ha dado el visto bueno a un negociador internacional en las conversaciones que van a mantener el Suiza con Puigdemont, aceptando así un trato de Estado a Estado entre España y Cataluña como uno de los pagos a su investidura.
Según señala el digital El Mundo, Sánchez reconoció la figura del mediador internacional durante una conversación informal que mantuvo con los periodistas que lo acompañan en su visita a Israel, Palestina y Egipto.
Para el Presidente del Ejecutivo español, la figura del mediador que delimita el ámbito del diálogo entre partidos, resulta beneficiosa cuando se trata de formaciones con posturas distantes y en situaciones donde existe desconfianza, como han reconocido ambas partes.
En los próximo días PSOE y Junts se reunirán en los próximos días en Ginebra, con la presencia de un verificador, algo que Sánchez considera que puede facilitar el diálogo con Puigdemont, fugado de la Justicia en España.