El Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha culpado a los grandes medios de comunicación de difundir las mentiras de la derecha porque es ella la que los domina. Y se quejó de que los socialistas no tienen «derecho a contestación ni réplica», en la reunión que ha mantenido en el Congreso con sus diputados y senadores, que le son fieles hasta el momento.

«El PSOE debe parar esta corriente reaccionaria», señalaba Sánchez, quien está convencido los socialistas van a ganar las elecciones del 23 de julio siempre y cuando se movilicen porque hay que hacer ver que «Los españoles deben decidir si quieren un presidente del Gobierno al lado de Biden o de Trump; al lado de Lula o Bolsonaro» y advertido que los adversarios jugarán sucio.

Sánchez, también ha culpado a los poderosos, entre los que citó a los banqueros y ha avisado que «la derecha extrema y la extrema derecha están envalentonadas. No tendrán ningún pudor para lanzar infundios y traficar con la mentira. Por eso debemos dar la batalla».

El líder socialista tiene claro que «la tormenta va a ser tremenda», por eso ha advertido a los suyos que las elecciones del 28 de mayo han sido solo «el aperitivo de suciedad, insultos y mentiras». «Van a tratar de crispar hasta límites insospechados (…). Se van a inventar barbaridades. Hablarán de pucherazo, de que hay que detenerme como responsable de ese pucherazo», sostuvo. «Sus maestros norteamericanos lanzaron a una turba enfurecida contra el Capitolio» y puso de ejemplo lo que hicieron algunos votantes de Trump tras las elecciones en Estados Unidos.

Por todo ello Sánchez ha pedido a los suyos «que nos mantengamos tranquilos y respondamos con argumentos y datos», añadiendo que si decidió adelantar las elecciones fue una decisión que tomó «pensando en vosotros y en vuestro trabajo. Ningún líder puede mirar para otro lado cuando los suyos reciben un castigo tan injusto y tan inmerecido. Sin esconderme, sin desentenderme, nunca lo he hecho».