El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez ha querido dejar claro que el uso de cualquier tipo de violencia» es «inadmisible» en una «democracia plena» como la española y que actuará «con contundencia» para preservar la seguridad ciudadana dejando claro que no hay nada que justifique el uso de la violencia, en relación a los disturbios que se están produciendo por la entrada en prisión del rapero Pablo Hasél en distintas ciudades de España.
Las palabras del Presidente del Gobierno son una clara alusión a su socio y vicepresidente el Ejecutivo, Pablo Iglesias que cuestiona la «plena normalidad democrática» en España y que Unidas Podemos se niegue a rechazar las escenas de violencia que se han visto en las calles de varias ciudades españolas estos días.
Sánchez, ha querido dejar claro que «en una democracia plena, y la democracia española es una democracia plena, resulta inadmisible el uso de cualquier tipo de violencia. No hay excepción a esta regla, no hay causa, ni lugar, ni situación que justifique el uso de la violencia. Ninguna, porque la violencia no es una libertad, es un ataque a las libertades de los demás».
«La violencia es lo contrario de la democracia. Es la negación de la democracia. Es la negación de la democracia», ha remarcado Sánchez, dejando claro que «en consecuencia, el Gobierno de España hará frente a cualquier tipo de violencia y garantizará la seguridad ciudadana» volviendo a señalar que la de España es una «democracia plena».
Para el Presidente del Gobierno, la democracia ampara el derecho de manifestación y de expresión, e incluso el derecho de expresar «los pensamientos más infames y más absurdos«, pero «nunca jamás ampara la violencia».
«El Gobierno se conducirá de acuerdo con el interés de nuestra democracia que no es sino el de mejorar la protección de la libertad de expresión y actuar con contundencia contra cualquier forma de violencia» concluía Pedro Sánchez.