El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anda que lo tira en esta campaña electoral, y si antes fue la vivienda y el campo, ahora el turno es para los mayores de 65 a los que subvencionará el cine con dinero de todos los españoles para que los martes solo les cuete dos euros.
Es el último anuncio hecho por Sánchez, en esta carrea desesperada que lleva por intentar captar votos de ciertos sectores donde no parece que le va bien, de cara a las elecciones autonómicas y municipales del próximo 28 de mayo.
Para ello, el Consejo de Ministros lo aprobará este martes. Supondrá una inversión de 10 millones de euros, para que los mayores de 65 vayan casi gratos al cine. Un anuncio que hacía en un acto junto al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, algo para Sánchez supone «un nuevo avance social» para facilitar a los jubilados, principalmente, que acudan a las salas de cine.
De esta forma el Gobierno subvencionará con un 75% de las entradas de los jubilados en España todos los martes y rebaja a menos de la mitad el precio de las entradas habitual en el día del espectador estimada en 4,88 euros.
Yo ya sé que a la derecha esto le va a molestar, pero esta es la diferencia: cuando ellos gobernaban, sus Consejos de Ministros eran de recortes y con nosotros, son de avances sociales», señalaba Sánchez.
Y además Sánchez, ha presumido de darle los 400 euros a los jóvenes, un «bono cultural joven para que hoy se puedan beneficiar de la cultura los jóvenes: ir al cine, comprar un libro o un cómic o ir a un festival» y de «convertir a España en Hub internacional para que las productoras puedan filmar sus películas y series aquí en nuestra tierra».
Y es que para el Presidente del Gobierno «hay que hacerse cargo de la frustración de la derecha. ¿Cuántos años llevan anunciando el apocalipsis? Se han quedado en el insulto, la descalificación y en el intento de derogación».
Eso si, Sánchez, ha vuelto a mantener el silencio sobre la lista electoral de EH Bildu, que incluye 44 etarras algunos con delitos de sangre y sin arrepentirse de los actos criminales.