A medida que avanzan las horas sube el tono de la tensión entre el Gobierno de Pedro Sánchez y el Comunidad Autónoma de Madrid de Isabel Díaz Ayuso, por la situación sanitaria de la Capital de España donde el Ministro de Sanidad ha avisado a los responsables madrileños que «deben revisar sus decisiones» o será el Ejecutivo español el que termine cerrando Madrid.
Poco ha durdo la paz entre las dos administraciones públicas cuando el pasado lunes, Sánchez y Ayuso escenificaban la colaboración entre el Gobierno Central y la Comunidad de Madrid para solventar la crisis sanitaria que está volviendo a confinar barrios y distritos madrileños.
El encargado de llevar a cabo esa amenaza ha sido el ministro de Sanidad, Salvador Illa, que desde Barcelona ha señalado que la Comunidad de Madrid debe tomar otras medidas más contundentes porque «existe un serio riesgo sanitario para los ciudadanos de Madrid y para los de las comunidades limítrofes», por eso emplazó al Gobierno regional a «revisar sus decisiones» o lo tendrán que hacer ellos.
Hoy domingo, el propio Illa insistía en Twitter que Ayuso debía tomar medidas más drásticas con Madrid y que sigan las recomendaciones de los científicos y sanitarios.
AGUADO PIDE UN «ALTO EL FUEGO POLÍTICO»
El vicepresidente de la Comunidad Autónoma de Madrid, Ignacio Aguado (Cs) ha salido hoy la palestra después de haber guardado silencio durante estos días para pedir a través de la red social Twitter «un alto el fuego político» .
Aguado aseguraba que “he hablado con los ministros Illa y Darias y les he trasladado la necesidad de continuar las reuniones entre Gobierno autonómico y nacional. Urge un alto el fuego político. Los madrileños merecen que acordemos conjuntamente las medidas para proteger su salud. Estemos a la altura”., algo que confirmaba el propio Salvador Illa indicando que «hemos mantenido comunicaciones con la Comunidad de Madrid. Desde la máxima lealtad institucional, les hemos emplazado a revisar las medidas anunciadas y a seguir las recomendaciones de los científicos y sanitarios”.
En las próximas horas o días sabremos si estas amenazas toman forma o por el contrario «la sangre no llega al río» y se terminan en poner de acuerdo ambas administraciones por el bien del ciudadano.
