El expresidente de Cataluña y huido, tras el procés, Carles Puigdemont, ha decidido regresar a Cataluña con el fin de torpedear la investidura este jueves de Salvador Illa, y por ello ha anunciado «el viaje de regreso desde el exilio», a pesar de seguir en vigor la orden de detención decreta por el juez Llarena si pisa suelo español.
Tras el acuerdo con Pedro Sánchez y la aprobación de la ley de amnistía, Puigdemont esperaba poder volver a España libre de toda carga, pero lo cierto es que se ha complicado su aplicación y de momento no se le va a aplicar por parte de los jueces, ha decidido regresar para la investidura de Illa, y bloquear, momentáneamente que puede elegido como nuevo presidente catalán, algo que esperar ser el, tras conceder los votos de sus siete diputados nacionales para Sánchez fuera de nuevo Presidente del Gobierno.
El sábado, en una carta abierta publicada en redes sociales, ya anunció su intención de volver a Cataluña asumiendo que su «detención» iba a ser «una posibilidad real en muy pocos días» y hoy su partido, Junts, ya ha anunciado que se espera que la «recepción institucional» de Puigdemont tenga lugar mañana en el Paseo de Lluís Companys en Barcelona, a las 9 horas de la mañana.
Para ese regreso, el Consell de la República Catalana, el ‘Gobierno paralelo’ de Puigdemont, ha convocado una concentración en el mismo punto junto con la Associació de Municipis per la Independencia (AMI), que además ha instado a los más de 700 alcaldes que conforman la asociación a recibir al expresidente en un comunicado donde señala «Os esperamos a todos y a todas en su recibimiento».
Tras la convocatoria por parte de la Diputación Permanente del Parlament del pleno de investidura del Salvador Illa para este jueves con el apoyo de todos los grupos salvo la abstención de PP y Vox, Puigdemont hacía público este video a través de la red social «X» (Twitter).