El vicepresidente del Gobierno español y líder de Unidas Podemos Pablo Iglesias ha reconocido que «no hay una situación de plena normalidad política y democrática en España cuando los líderes de los dos partidos que gobiernan Cataluña, el uno está en la cárcel y el otro en Bruselas» en referencia a Junts, Oriol Junqueras (ERC) y Carles Puigdemont respectivamente (JxC).
Iglesias, ha definido de «excepcionalidad» la situación de los líderes de ERC y Junts y piensa que es «evidente» que ha deteriorado la imagen de la democracia española si actual situación.
El Vicepresidente del Gobierno y líder de U.P. señala que «si como miembro del gobierno voy a cualquier país y me dicen que los líderes políticos de los dos partidos que gobiernan en Cataluña están uno en la prisión y el otro en Bruselas, me están describiendo los hechos. Estas personas no han puesto bombas, no han disparado contra nadie. Pues es evidente que hay una situación de excepcionalidad, y lo tengo que reconocer como vicepresidente del gobierno español» en relación a las declaraciones del ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, sobre los presos del «proces».
«¿Cómo puede haber normalidad democrática en nuestro país si un conflicto político ha dejado de poder gestionarse por vías políticas y ha acabado gestionado por vías policiales y judiciales? Es una cosa problemática que a ningún demócrata nos puede gustar» ha remarcado Iglesias.
En cuanto a la mesa de diálogo en Cataluña, el líder de Podemos indicaba que «siempre hemos defendido un referéndum, esta es nuestra posición política. Pero cuando nos sentamos en una mesa diferentes partidos, en este caso dos gobiernos, es fundamental construir un acuerdo que seguramente no contendrá el cien por cien de la voluntad política de todos los actores».
Pablo Iglesias cree que debe ser un acuerdo que permita una «gestión democrática de un conflicto que es político». «Sé que me atacarán mucho por decir esto, pero para que esto se produzca en circunstancias aceptables no puede haber independentistas en las prisiones y en el exilio. El diálogo no podrá llegar a buen puerto si hay gente en la prisión o en el exilio».
Tiene claro el Vicepresidente del actual Gobierno que quien piense que «lo que pasa en Cataluña lo resolverán las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado o los jueces no entiende la historia del Estado de los últimos 200 años» porque «no es una novedad» en un estado con una «realidad plurinacional en la cuestión identitaria».
Por último ha señalado que el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ya ha presentado una propuesta para reformar el delito de sedición para tener un código penal «mejor, más democrático, más garantista y que favorecerá una gestión del conflicto en Catalunya en unos términos más razonables».