El presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, quiere comprar el voto de los jóvenes y para ello no está teniendo reparos en realizar sus ya conocidas promesas-mentiras durante esta precampaña electoral de cara a las elecciones autonómicas y municipales del próximo 28 de mayo, como se puede comprobar en cada mitin que está ofreciendo.
Sánchez no ha tenido reparos, sabiendo que no va a poder cumplir todas su promesas, en anunciar la movilización de 50.000 casas de la Sareb para alquiler social o la construcción de otras 43.000 gracias a los créditos del ICO, y promover otros 20.000 inmuebles más para alquiler social y asequible en suelo del Ministerio de Defensa, que llegarán para «dejar atrás el modelo de la vivienda de la derecha».
De esta manera intenta recalcar que el Gobierno de España está dispuesto a convertir el derecho al acceso a la vivienda en «una política de Estado» y en el «quinto pilar del estado del bienestar», en ese claro intento de captar el voto joven.
Este martes en el Consejo de Ministros se aprobará una línea de avales del ICO (Instituto de Crédito Oficial) para cubrir “hasta el 20%” de la hipoteca que suscriban las personas de hasta 35 años y las familias con menores a su cargo que compren su primera vivienda, y siempre que los ingresos individuales de los solicitantes de la hipoteca no superen los 37.800 euros anuales, que según la Agencia Tributaria, en España hay 16,6 millones de asalariados con rentas inferiores a 36.500 euros anuales.
Los bancos solo conceden hipotecas por una cantidad cercana al 80% de su valor, por eso, hay muchos ciudadanos que no pueden adelantar ese otro 20% o no tienen quien les avale para hacerlo, desisten de pedir la hipoteca, algo que cubriría el Gobierno con los avales ICO, con lo cual si no se paga la hipoteca, sería el organismo oficial que pagaría la cantidad avalada.
Según Sánchez «menos mal que estábamos los socialistas al frente cuando llegó la pandemia porque si no, no hubiera sido lo mismo» y a pesar de que en cinco años que lleva en el poder no ha hecho nada en materia de vivienda, ahora señala que que “tenemos que hacer de la vivienda lo que dice nuestra Constitución: que es un derecho, no un problema […] Yo quiero que España se convierta en un país que tiene un 20% de vivienda protegida. Esa es la gran causa nacional a la que voy a convocar a todos los españoles para la próxima década”.
Pero al margen del famosos bono cultural de 400 euros para los que cumplen 18 años, no solo la vivienda es una de la promesas-mentiras de Sánchez, en esta precampaña electoral, sino que anuncia a los jóvenes vacaciones gratuitas, al prometer que subvencionará las vacaciones -entre el 15 de junio y el 15 de septiembre- de los jóvenes entre 18 y 30 años con una bonificación del interrail europeo en un 50% para que puedan viajar este verano por todo el continente y además subvencionará en un 90% «aquellas infraestructuras ferroviarias y también de autobuses que sean competencia de la administración general del Estado», según el Presidente del Gobierno.
Si no fuera porque ya antes de llegar a la La Moncloa, mintió a los españoles, algo que ha sido la tónica predominante durante toda la legislatura ya que la mayoría de sus promesas se quedan en aguas de borraja sin que finalmente se pongan en marcha.