El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha vuelto a entrar de lleno en la polémica de la fiscalidad autonómica y lo ha hecho por propia iniciativa, en un momento en el que el anuncio de rebaja fiscal masiva en Andalucía ha puesto el debate encima del tablero y de la estrategia electoral de cara a las elecciones autonómicas de mayo de 2023.
En una entrevista en Onda Cero y cuando se le había preguntado por el tope de precios de la cesta de la compra que busca Yolanda Díaz y por el de las hipotecas que reclama Podemos, Escrivá ha sacado en primer lugar este tema a colación «sobre el que no se me ha preguntado pero que me tiene muy sorprendido por lo que he visto que ha anunciado Andalucía»
«Me parece muy sorprendente que en plena crisis llena de incertidumbre se tome una medida como ésta, tan regresiva», que favorece a unos pocos, ha destacado el ministro, que ha dicho que habla «a título personal».
Cabe recordar que en agosto de 2021 Escrivá causó un incendio en el seno del lado socialista del Gobierno, esta vez, cuando tras reunirse con el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, aseguró que había que imponer un impuesto a las rentas altas madrileñas, lo que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, desmintió rápidamente.
El ministro ha vuelto a la carga motu proprio con el tema y ha asegurado que le interesa la «discusión técnica» y que aboga por un modelo como el de Australia, más eficiente. «Es un tema sólo técnico», ha insistido.
Eso sí, no ha planteado matices en su propuesta, si sólo se refiere a recentralizar los Impuestos de Patrimonio y Sucesiones sobre todo para obligar a la Comunidad de Madrid a subirlos, lo que el Gobierno de Pedro Sánchez pretendía hacer tras aconsejarlo sus expertos asesores fiscales que designó para la reforma fiscal y que lleva tiempo congelado.