A pesar de la «pataleta» que estamos viendo estos días tras conocerse el acuerdo secreto de Pedro Sánchez, con Marruecos sobre el futuro del Sáhara, la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha rechazado romper el Ejecutivo por entender que sería una gran irresponsabilidad.
La titular de Trabajo ha rechazado que Unidas Podemos deba abandonar el Gobierno para ser coherente con su postura. Así ha asegurando que su partido es coherente con el acuerdo de Gobierno, incluso ha dicho que el conjunto de las fuerzas políticas son coherentes, mientras que Sánchez es, en su opinión, el «incoherente» por haber cambiado de posición sin dar explicaciones.
En este contexto, Díaz, ha cargado este lunes contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por entender que ha sido «incoherente» por cambiar de postura sobre el Sáhara con «enorme opacidad», sin dar explicaciones y sin contar con el socio de Gobierno.
No obstante y a pesar de haber cargado duramente contra la decisión del Jefe del Ejecutivo, que ahora apoya una autonomía para el Sáhara propuesta por Marruecos, ha dejado claro que no va a romper el Gobierno de coalición. Considera que en este momento sería una decisión de gran «irresponsabilidad».
CONVERSACION PENDIENTE CON SANCHEZ
A su vez, ha señalado de que tiene pendiente una conversación con el presidente del Gobierno en la que tienen que abordar tres asuntos: la crisis económica y social que está azontando a España; la crisis energética y «lo que tiene que ver con la ONU, el Sáhara y Marruecos y las previsibles consecuencias».
Díaz rechaza que esté incumpliendo el acuerdo de Gobierno que señalaba que las decisiones en política exterior las adopte el jefe del Ejecutivo. En este sentido, ha admitido que la política exterior la marquen el presidente del Gobierno y el ministro de Exteriores.
Ha insistido que quien está incumpliendo el mandato del país es el presidente del Gobierno y que ella es «muy respetuosa con las competencias de cada Ministerio». De hecho, ha recordado que ella misma no solo compartió y dialogó con otros ministerios sobre la reforma laboral, sino que incluso tuvieron que hacer «comisiones paralelas para ello«.
Pero ha insistido en que son un gobierno de coalición y que los asuntos de fondo «se dialogan entre las partes». De hecho, ha criticado las «formas incorrectas» con las que ha procedido Pedro Sánchez no solo con Unidas Podemos, sino con «el conjunto del país».