Estaba cantado y se produjo, Junts ha tumbado la Ley de Amnistía tal y como estaba diseñada en la votación llevada a cabo esta tarde del martes en el Congreso de los Diputados, al rechazar el PSOE todas las enmiendas que a última hora pretendían introducir los de Puigdemont con el fin de blindar a todos los implicados en el «procés», incluido el terrorismo por completo y la traición ante la Justicia.
El rechazo en la votación, hace que ahora de nuevo la Ley de Amnistía vuelva de nuevo a la Comisión de Justicia para volver introducir seguramente nuevas cesiones del PSOE a Junts para que pueda salir adelante, y Pedro Sánchez se mantenga en La Moncloa.
Los de Puigdemont, tras las últimas noticias salidas de los juzgados y la Audiencia Nacional, insisten en que la ley de amnistía no deje fuera a ningún implicado en el procés y por eso no van a votar una Ley de Amnistía que no incorpore los delitos por los que se les pueda juzgar y que quedan ahora mismo fuera de la norma.
La Ley de Amnistía vuelve ahora de nuevo a la Comisión de Justicia y tiene un mes de plazo para introducir las enmiendas que pretende Junts, para de nuevo volver al Pleno del Congreso de los Diputados para su aprobación o rechazo final.
La portavoz de Junts, Míriam Nogueras, lo dejó claro en su intervención señalando que «detener la represión a medias no es detenerla», y por eso «Junts no puede participar en dejar al independentismo catalán expuesto a las arbitrariedades de la cúpula judicial».
Además Nogueras, señaló directamente a tres jueces como son el instructor del procés, Pablo Llarena, el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón y el instructor de la conexión rusa del independentismo, Joaquín Aguirre y dejó claro que «hoy el Gobierno español debería demostrar toda su autoridad ante estos hechos inaceptables», por el cerco judicial a Puigdemont por delitos de terrorismo y traición.