Sola y de riguroso negro ha asistido la ministra de Igualdad, Irene Montero, al «entierro» de su Ley del «Solo si es si», en el Congreso de los Diputados con la única compañía y apoyo moral de su compañera de partido, la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ya que la bancada de ministros estaba prácticamente vacía con ausencias tan notables como la del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
La ausencia de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo en el debate de la toma en consideración de la proposición de ley del PSOE ha sido una de las más clamorosa, y que ratifica su puesta de perfil durante meses en el enfrentamiento que mantienen por esta Ley tanto el PSOE como Podemos, en una ruptura es irreversible, según lamentan fuentes de Igualdad a El Debate.
El debate en el Congreso, fue bronco como se esperaba desde el primer momento, con el PSOE tratando de pasar cuanto antes el mal trago de tener que apoyarse en el PP y Vox para reformar una ley emblema del ala morada del Gobierno, aunque aprobado el Gobierno al completo, socialistas y podemita.
Montero contó con el apoyo de Esquerra, Bildu, el BNG y la CUP que se han posicionado en contra de la proposición de ley del PSOE y a favor de Unidas Podemos. Mientras que los socialistas se han apoyado en los votos del PP y Vox, para sacarlo adelante.