VOX ha presentado, desde su sede Nacional el programa económico para las elecciones del 23-J. Jorge Buxadé, vicepresidente de Acción Política, e Iván Espinosa, portavoz del Grupo Parlamentario en el Congreso, han sido los encargados de explicar el documento, que es «el resultado del diagnóstico que hemos hecho de la situación económica».
Un diagnóstico que comienza con dos décadas sin crecimiento económico en España, que ha llevado a «una generación completa a no conocer una etapa de crecimiento económico, de prosperidad». Así, partimos de una situación en la que falta «ilusión» tanto en las empresas, como en los emprendedores y en las universidades.
Tanto Buxadé como Espinosa se han referido a dos de las banderas de VOX: la protección de las familias y de los mayores. Respecto a los primeros, bajada radical de impuestos, IVA cero a productos de primera necesidad (cesta de la compra, productos para el crecimiento y adquisición de la vivienda familiar). Respecto a los mayores, «quienes han levantado la Nación con su esfuerzo», protección de sus pensiones.
Buxadé ha criticado, además, que siempre se hable de un sistema de pensiones «en riesgo». «¿Por qué no se habla de un sistema autonómico en riesgo?¿Por qué no se habla de chiringuitos en riesgo?», ha preguntado. En este sentido, Espinosa se ha referido a la necesidad de invertir la pirámide demográfica, de modo que haya una mayor base de cotizantes que sostengan las pensiones.
Ambos han coincidido en que es necesario sacar las doctrinas ideológicas de la economía. Es decir, suprimir impuestos verdes, permitir que la tecnología marque el ritmo, y no los políticos, en relación a los coches eléctricos. Tecnologías limpias como las nucleares. En definitiva, «devolver la cordura» y así «querer crecer». Porque, tal y como han asegurado, «si los españoles nos ponemos a ello, lo vamos a conseguir».
La carta de presentación del documento es toda una declaración de intenciones: “en VOX pondremos fin al infierno fiscal y burocrático que sufren los españoles bajando radicalmente todos los impuestos y recortando drásticamente el gasto político innecesario para impulsar nuestra competitividad y reforzar nuestras infraestructuras y servicios públicos”.
Bajada radical de impuestos
Entre las medidas destinadas a aliviar la carga fiscal de los españoles, destacan de manera muy especial las siguientes:
- IRPF: para implementar la perspectiva de familia, fortaleceremos la economía de las familias y protegeremos su capacidad de ahorro e inversión procediendo a la simplificación progresiva y continuada del IRPF a un tipo único reducido del 15% a aplicar sobre bases imponibles inferiores a 70.000 euros y un tipo ordinario del 25% a aplicar a bases imponibles superiores a dicha cantidad, aplicando la exención de 22.000€ anuales de rentas del trabajo con independencia de tener uno o dos pagadores.
- Los tipos únicos del IRPF del 15% y del 25% se reducirán cuatro puntos por cada hijo, de modo que una familia con cuatro hijos no tributará en el IRPF si las rentas son inferiores a 70.000 euros y pagará solo un 9% si sus rentas son superiores a 70.000 euros.
Hasta la consecución del tipo único al 15%:
- Recuperaremos la deducción por inversión en vivienda habitual en el IRPF para que los españoles con préstamo hipotecario vigente para su vivienda habitual puedan deducirse los intereses que abonan y compensar directamente en sus bolsillos la subida de tipos de interés, favoreciendo la adquisición en propiedad.
- Extenderemos a toda la Nación la deducción por costes de alquiler en el IRPF para que todos los españoles con contratos de alquiler puedan deducirse parte de su coste y compensar directamente en sus bolsillos la subida del IPC.
- El ahorro dejará de tributar por su falso incremento provocado por la inflación incluyendo tablas de actualización automática; y las pensiones contributivas estarán exentas de IRPF por justicia con quienes han tributado durante toda su vida laboral.
- El resto de las deducciones, reducciones y bonificaciones – muchas de ellas de contenido ideológico – se reducirán progresiva y continuadamente acompasando su eliminación a la reducción efectiva del tipo aplicable, para facilitar su gestión, reduciendo costes y dificultades a los españoles.
- Los costes laborales derivados de la contratación de asistencia en el hogar y personal sanitario de ayuda a las familias, igualmente, los gastos escolares reducirán la base imponible del IRPF.
- Aprobaremos una nueva deducción por nacimiento o adopción en el IRPF, por un importe de 1.200 euros para el primer hijo, 1.600 euros por el segundo, 2.500 por el tercero y 2.750 por el cuarto hijo en adelante, con la posibilidad de cobro de manera anticipada a través de la Agencia Tributaria.
- IVA: bajaremos radicalmente el IVA en los productos de primera necesidad y esenciales, tales como productos y fármacos infantiles, pañales o productos geriátricos); eliminaremos el IVA para la adquisición de primera vivienda habitual; y eliminaremos la doble imposición actual que se produce en aquellos artículos ya gravados con impuestos especiales.
- Revertiremos la subida de IVA realizada en 2012, la mayor subida del IVA del mundo que fue perpetrada por el PP, pasando de nuevo el tipo reducido al 8% y el tipo general al 18%. A su vez, revertiremos las subidas de más de 17 puntos en el material escolar, así como en cine y peluquerías, entre otros productos y servicios.
- Aplicaremos una reducción progresiva de impuestos y gravámenes que pesan sobre los suministros del hogar familiar y, especialmente, sobre las familias numerosas (electricidad, agua, gas…).
- Impuesto de Sociedades: reducción del tipo progresiva y continuada en la legislatura hasta alcanzar el 15% y simplificación del Impuesto sobre Sociedades para favorecer el crecimiento de nuestras empresas y la creación de empleo en España, así como para atraer los beneficios generados por empresas españolas en el exterior. El tipo aplicable se reducirá efectivamente en función de la relocalización de beneficios en España y de la creación efectiva de empleo en España, con incentivos fiscales a la inversión y a la reinversión de beneficios y plusvalías en bienes y activos tangibles e intangibles; eliminando toda discriminación de la inversión por tamaño.
- Suprimiremos el Impuesto sobre el Patrimonio, el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y Plusvalías municipales en todo el territorio nacional, impuestos que suponen confiscaciones injustas, duplicadas o desproporcionadas del patrimonio de los españoles.
Por otra parte, VOX incluye entre sus medidas estrella algo que lleva años reclamando en todos los debates de presupuestos del Congreso de los Diputados que es la inclusión de la “metodología de base cero en la elaboración de los presupuestos y marcando como objetivo la eliminación progresiva del déficit y de la deuda pública que condena a la ruina a las futuras generaciones, optimizando las cuentas públicas”.
Drástica reducción del gasto político ineficaz
Para llevar a cabo las medidas en materia de bajada de impuestos, esto debe ir acompañado de una drástica reducción del gato político ineficaz que sufren todos los españoles como consecuencia de una industria que no ha parado de crecer en los últimos años.
En consecuencia, VOX propone unas medidas muy concretas para acometer esta reducción, entre las que destacan:
- Acometeremos una revisión sistemática y minuciosa de las Administraciones Públicas, dirigida a racionalizar su estructura y funciones, así como la de los diferentes organismos y entidades pertenecientes al sector público español, enumerando y suprimiendo todos aquellos organismos innecesarios o meramente ideológicos. A su vez, auditaremos y eliminaremos todo el gasto público relacionado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030.
- Suprimiremos todas las oficinas de implantación de la Agenda 2030 y crearemos una Oficina Estratégica para el Interés Nacional que vele por los intereses de los españoles en el ámbito económico, defendiendo los intereses de las empresas españolas en el exterior y atrayendo inversiones productivas.
- Procederemos a la reestructuración de la Administración, impulsada tanto desde las Cortes Generales como desde los parlamentos regionales, integrando los servicios públicos esenciales en la estructura central del Estado (Sanidad, Educación, Justicia…). A su vez, cerraremos aquellos ministerios, secretarías de estado y direcciones generales que hayan demostrado su inutilidad y sean simples herramientas de propaganda ideológica del Gobierno, como el Ministerio de Igualdad.
- Acabaremos con las subvenciones a los sindicatos, partidos políticos y patronal. Estas organizaciones, que en muchas ocasiones han renunciado a defender los intereses de sus asociados, deben sostenerse con la financiación de sus integrantes. Como paso previo, consultaremos al pueblo español sobre su voluntad de eliminar las subvenciones a partidos, sindicatos y patronales en aplicación del artículo 92 de la Constitución, sobre consultas políticas de especial relevancia.
- Cerraremos todos los chiringuitos públicos ideológicos regados con dinero público como los chiringuitos LGTB, de memoria histórica, ecologistas radicales o separatistas o vinculados a la implementación de la Agenda 2030 y pondremos fin a las subvenciones y ayudas cuando se trate de entidades privadas.
- Crearemos una Oficina Nacional de lucha contra el Fraude y la Corrupción, que garantice la independencia en la función y la igualdad de los españoles, poniendo fin a la dispersión autonómica. Mejoraremos los mecanismos y portales de transparencia, denuncia y rendición de cuentas para prevenir la corrupción en la Administración con el dinero de los españoles. A su vez, lucharemos contra la evasión y la elusión fiscal, especialmente de multinacionales y gigantes de internet. Es necesaria una respuesta contundente al fenómeno del traslado de ganancias de España a paraísos fiscales.