El Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez ha estado presente en la clausura del XIV Congreso regional del PSOE andaluz celebrado en Torremolinos (Málaga), donde se ha encumbrado a Juan Espadas y apartado de la primera líneas política a Susana Díaz definitivamente y con lo que espera poder volver a poder recuperar la Junta en las próximas elecciones andaluzas.

Sánchez ha querido dejar claro que da por superada la etapa de las tensiones entre ambos bandos indicando que «lo vamos a hacer, Juan y yo. Él en San Telmo y yo en Madrid. Gobernaremos en Andalucía y en España».

Además el Presidente del Gobierno ha arremetido contra el PP reivindicado que «somos un Gobierno que cumple y la oposición lo que hace es gritar e insultar» y que ha logrado mejorar la situación del país respecto al inicio de la pandemia.

En la misma línea y citando al fundador del partido, Pablo Iglesias, ha indicado que ni «la estridencia» ni «los desplantes» van a favor de la solvencia y la fortaleza de los proyectos políticos, señalando esto después de ver «algunas cosas» que suceden «en otras organizaciones», en velada referencia al enfrentamiento entre la dirección nacional del PP y la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Para Sánchez es evidente que España está avanzando y «va mejor» que hace un año y un ejemplo es la vacunación, que es «un ejemplo» en Europa ya que más del 90% de la población está vacunada con la pauta completa.

En este sentido, ha señalado que hoy España ha recuperado los niveles de empleo previos al estallido de la pandemia, a pesar de que se destruyeron 1,4 millones de puestos de trabajo y el PIB cayó 10 puntos en un año.

A su juicio, la recuperación del empleo ha sido posible gracias a los ERTE, las ayudas a autónomos y los créditos ICO y se ha llevado a cabo en un tiempo «récord», muy inferior a cuando la derecha gobernó y aplicó políticas «neoliberales» tras la crisis económica del año 2008.

Sánchez se ha preguntado para qué intereses gobierna la derecha al tiempo que ha defendido que el PSOE gobierna para subir el salario mínimo vital, revalorizar y blindar el sistema público de pensiones mientras que el PP vota en contra de estas medidas.

Sobre la inconstitucionalidad del estado de alarma sentenciada por el Tribunal Constitucional ha dicho que «fue una decisión difícil, pero necesaria, si tuviese que volver a hacerlo, lo haría de nuevo, gracias a eso salvamos cientos de miles de vidas», ha asegurado. «Yo supe que no estaba solo, os tenía a todos vosotros, al conjunto de la mayoría social de este país detrás de esa decisión».