El propio Ministerio de Sanidad en un informe ha reconocido que la vacuna de Pfizer/BioNTech, que ahora mismo está siendo administrada en residencias de ancianos de toda España, genera efectos secundarios, si bien no se pueden considerar que sean graves.
Suelen aparecer tras la segunda dosis, la que se pone a los 21 días después de recibir la primer dosis, siendo los síntomas más habituales las reacciones alérgicas locales, la fatiga y las cefaleas aunque parecer ser, según constata Sanidad, estos efectos adversos son menos frecuentes entre las personas mayores de 55 años.
Estos datos aparecen en en el documento «Estrategia de vacunación frente a COVID-19 en España», un informe técnico elaborado por el Grupo de Trabajo Técnico de Vacunación COVID-19, de la Ponencia de Programa y Registro de Vacunaciones que está formado por cerca de treintena de profesionales de la medicina de diversos ámbitos, nacionales y como autonómicos así como integrantes de sociedades médicas.
En este documento, en su anexo, se incluye una breve descripción del tipo de efectos secundarios que se han asociado hasta el momento con la vacuna de Pfizer, que es la que de momento se está poniendo en España,
«Los efectos adversos más comunes fueron reacciones locales (84.1%), fatiga (62.9%), cefalea (55.1%), mialgias (38.3%), escalofríos (31.9%), artralgias (23.6%) y fiebre (14.2%)» que traducido son cansancio, dolores de cabeza, escalofríos, dolores musculares y fiebre o febrícula, síntomas muy parecidos a los de la gripe común.