Juan Carlos Monedero, cofundador de Podemos, ha sido citado ha declarar como investigado por el juez Juan José Escalonilla investiga la presunta financiación ilegal del partido por un presunto cobro de 26.200 euros poco antes de que Podemos contratase a la consultora mexicana.
Monedero ha sido citado para el próximo 15 de marzo a las 11.30 ante el Juez que investiga el caso «Neurona» para que explique el cobro realizado desde la agencia de comunicación contratada por Podemos para su campaña de las elecciones generales de abril de 2019 que alerto al Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención de Blanqueo de Capitales (Sepblac) por las dudas sobre su legalidad.
Posteriormente este organismo se los traslado a la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional, que ha estado analizando la operación en secreto durante los últimos meses en lo que se trata de una pieza separada de la causa sobre la presunta financiación ilegal de Podemos.
En su escrito el Juez señala que “en el informe de la fuerza actuante se deja constancia de que entregó a dicha entidad bancaria como justificación una factura por importe de 30.000 dólares bajo el concepto de ‘300 horas de consultoría presencial Buenos Aires, Colombia y México’” añadiendo que «en dicha factura figura como emisor de la misma Neurona Consulting S.A. cuando lo lógico es que si fue Juan Carlos Monedero el prestador de dicho servicio sea expedida por él, no conteniendo además receptor”.
“Se señala además que dicha factura está fechada el 30 de diciembre de 2018, correspondiéndose con un domingo, tratándose además de la factura número 1, lo que permite concluir racionalmente, en base a la fecha de dicha factura, que a un solo día de terminar el año no se han emitido más facturas, y por tanto no ha tenido actividad” añade el magistrado.
Por último el juez Escalonilla significa que “a lo anterior cabe añadir según indica la fuerza actuante la habitualidad de la emisión de facturas falsas bajo el amparo de la presunta realización de servicios de asesoría, al tratarse de un servicio de difícil comprobación”.