Tras varios meses de bajada del Indice de Precios al Consumo (IPC), la tendencia se ha roto en el mes de febrero al registrar una subida hasta el 6,1% y la subyacente se ha disparado hasta el 7,7%, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), este martes.
Según estos datos, las principales causas de esta subida vienen propiciadas por la el incremento de los precios de la energía y los alimentos, que sitúan al mes de febrero con la tasa interanual más alta, desde el mes de noviembre del pasado año cuando alcanzó el 6,8%.
Esta subida hasta el 6,1% en el mes de febrero, viene motivada, según el INE, por por la subida de los precios de la energía así como de los alimentos y bebidas no alcohólicas.
En el lado opuesto, en febrero bajaron los precios de los carburantes y del transporte combinado de pasajeros, propiciado por los bonos gratuitos al transporte que tanto el Gobierno central, como las comunidades autónomas han puesto en marcha.
En cuanto a la inflación subyacente, que no tienen en cuenta ni los alimentos no elaborados ni productos energéticos, en el mes de febrero subió dos décimas, hasta situarse en el 7,7%, es decir 1,6 puntos más que el IPC general, datos que hace 40 años que no se producían.