La nueva propuesta realizada por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migración a los agentes sociales sobre el cambios en el periodo de cómputo de la pensión estima que ésta se calcule o con los últimos 25 años cotizados o con 29 años de cotización, de los que se podrán excluir los dos peores, por lo que el cómputo, en este segundo caso será de 27 años.

El Ministerio, de esta forma permitirá elegir entre lo que ya hay, que es la de los últimos 25 años de cotización o bien utilizar un periodo de cómputo de 29 años, eliminando los dos peores años cotizados, y que serviría para los próximos 20 años.

El método de los 29 años cotizados se llevaría a cavo de progresivamente durante los próximos 12 años a partir de 2026, lo que supondría un beneficio con especial incidencia en los trabajadores con carreras irregulares ofreciendo al pensionista ambas posibilidades con la idea de aplicar lo que resulte más ventajoso para el, con el objetivo de que no se vean perjudicados aquellos que hayan visto mermada ingresos en sus últimos años en activo y que tanto su socio de Gobierno, como la propia Comisión Europea han visto con buenos ojos esta propuesta.

Este sistema dual de cómputo de las pensiones comenzaría a aplicarse en 2024 y se mantendrá hasta 2040, para posteriormente empezar un periodo transitorio hasta 2044 adaptando un sistema que beneficie a los jóvenes

Además para hacer frente el gasto de las jubilaciones de la generación denominada ’baby boomers’, se propone duplicar la sobrecotización asociada al Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que actualmente es del 0,6%, se elevará hasta el 1,2% en 2029, recayendo el reparto de la aportación en un 83,4% sobre la empresa y en el 16,6% los trabajadores.

El Ejecutivo propone además la subida de las bases máximas, que se hará entre 2024 y 2050 sumándole a la cuantía anual del IPC una cuantía fija de 1,2 puntos porcentuales, con el fin de conseguir una mayor recaudación para cubrir el gasto de las pensiones.

Las pensiones máximas se elevarán anualmente con el IPC al que habrá que añadir un incremento adicional de 0,0115 porcentuales acumulativos cada año hasta 2050, y partir de 2050 y hasta 2065 habrá incrementos adicionales.

Otro de los aspectos es mejoras las pensiones mínimas estableciendo una camino hasta que se alcancen el 60% de la renta mediana, tomando como referencia la evolución de la pensión mínima con cónyuge a cargo, que alcanzaría entre 2024 y 2027 el 60% de la renta mediana correspondiente a un hogar de dos adultos.

En cuanto a las pensiones no contributivas, el proceso será similar con un crecimiento hasta converger en 2027 con el 75% del umbral de la pobreza calculado para un hogar unipersonal.

Los vacíos de cotización se compensarán con el 100% de la base mínima los primeros 48 meses y con el 50% de la base mínima a partir del mes 49, añadiendo para las mujeres asalariadas el 100% de la base mínima entre el mes de vacío 49 y el 60 y el 80% de la base mínima entre el mes 61 y el 84 , y un complemento de brecha de género de las pensiones se incremente un 10% adicional a su revalorización anual en el bienio 2024-2025.