El Gobierno da marcha atrás y no limitará el precio de la luz a 180 euros por megavatio hora, sino que trabaja ahora en otras opciones que permitan concitar mayor unanimidad en el ámbito de la UE.
El cambio de postura se produce apenas cuatro días después de que lo anunciara en una entrevista en la radio la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, asegurando que defendería esta propuesta de forma conjunta con el Gobierno portugués en el Consejo Europeo que se celebrará esta semana, con el objetivo de evitar el efecto del encarecimiento de la electricidad sobre empresas y familias.
Ahora esta fórmula, que había provocado el rechazo tanto por parte de diferentes patronales como asociaciones industriales, queda totalmente aparcada, probablemente ante la imposibilidad de logar un acuerdo en el marco europeo.
La rectificación sucede precisamente cuando el presidente Pedro Sánchez está inmerso en una gira por Europa para convencer a los socios de la necesidad de reformar el mercado energético.
El Gobierno confía en un paquete de medidas a nivel europeo y por eso Sánchez descartó tomar medidas propias hasta el consejo de ministros del próximo 29 de marzo.