Lo que denominamos como democracia en la actualidad parece que pierde fuerza entre los jóvenes menores de 36 años ya que un 42% de ellos prefieren una dictadura militar, en una encuesta mundial llevada a cabo por Open Society Foundations.
La encuesta publicada hace unos días por La Vanguardia, detalla que si bien el 86% de los 36.000 encuestados en 30 países prefiere vivir en un país democrático, la cifra cae al 57% entre los menores de 36 años, que además el 42% de ellos, inscritas en las denominadas generaciones Z y Milennial, cree que las dictaduras militares son mejores formas de gobierno y un 35% preferiría vivir en un régimen civil pero autoritario, sin división de poderes ni un sistema parlamentario efectivo.
Lo que refleja esta encuesta es que los jóvenes de entre 18 y 36 años no ven claro que la democracia pueda solucionar estos problemas y mejorar sus vidas condicionados probablemente por las nuevas tensiones, en democracias cada vez más polarizadas, con la violencia política que existe en estos momentos.
Entre los encuestados, el 58% considera que durante el 2024 la tensión política en su país derivará en violencia física, como lo refleja que dos tercios de los franceses y los estadounidenses están convencidos de ello. Los conflictos raciales estallaron en Francia durante la pasada primavera y Estados Unidos, con las elecciones polarizadas entre Donald Trump y Joe Biden.
Una de las principales causas son las complicaciones de los jóvenes para sacar sus vidas adelante que hace que cuestionen la democracia, mientras que para la gente con más de 56 años, un 71% cree que no hay sistema mejor, ya que solo un 20% apoya una dictadura militar.
Los resultados de la encuesta son «sobrios y alarmantes», reconoce Mark Malloch-Brown, presidente de Open Society, al indicar que «la mayoría de la gente en todo el mundo aún quiere vivir en una democracia, pero si nos fijamos en cada generación, la fe se va diluyendo entre los jóvenes a medida que aumentan sus dudas sobre la capacidad de la democracia para lograr mejoras tangibles en sus vidas. Esto debe cambiar».
La mayoría de los encuestados si consideran que las democracias que son mejores que las dictaduras para construir escuelas y hospitales, para proteger el medio ambiente y combatir la delincuencia.
Des esta encuesta se extrae que el 53% opinan que su país avanza en la dirección equivocada y el 42%, cerca de la mitad, cree que las leyes no garantizan su seguridad personal, como es el caso de un país como Francia, algo que explicaría el por qué del auge de la extrema derecha.
En cuanto a los políticos, la confianza en ellos es cada vez pero ya que uno de cada tres encuestados considera que sus representantes no trabajan por el bien común de los ciudadanos que les votan.