El líder de Vox, Santiago Abascal es consciente que estas elecciones generales del próximo 23-J es la oportunidad de acabar con el «sanchismo» y de hacerlo «sería un verdadero drama para España» por eso «es ahora o nunca: nos estamos jugando todo».

En una entrevista concedida a El Debate este domingo, Abascal cree que «la clave no es echar a Pedro Sánchez, la clave es echar a Pedro Sánchez para derogar las políticas de Pedro Sánchez» y se pregunta «Qué pasaría si el socialismo continúa? Pues más de lo mismo, pero más extremista».

Abascal tiene claro que «Las leyes totalitarias, bien sea de memoria histórica o de género. Políticas económicas nefastas que impiden la prosperidad de los españoles, que roban el futuro a la juventud, que arrebatan a los mayores la herencia que nos han entregado».

Por eso, el líder de Vox cree que «El 23 de julio va a haber un gran resultado y que el mandato de los españoles va a ser tan claro como en las elecciones municipales y regionales» y aunque cree en el sistema electoral español «la limpieza de las elecciones la pone en solfa el PSOE cuando utiliza el BOE para comprar votos».

«No tengo ninguna duda del recuento. Las mesas están vigiladas con representantes de los partidos, de la Administración. Hay un recuento el miércoles siguiente de las elecciones delante de los jueces, que vuelven a abrir los sobres con las actas. Ha habido dudas muy serias con el voto por correo porque hemos visto cómo el PSOE y algunos partidos adláteres pro marroquíes estaban comprando votos«, indicaba Abascal, por eso pide que la Junta Electoral despeje «cualquier duda sobre la custodia de los votos por correo desde que se emiten hasta que llegan a la urna».

PACTOS CON FEIJÓO

El presidente de Vox, Santiago Abascal no sabe muy bien a que está jugando el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, viendo la política de pactos que están llevando los populares tras las elecciones autonómicas y municipales al indicar que parece que «el señor Feijóo está muy contento, según él, de haber roto la política de bloques del PSOE, porque pacta con Vox en Valencia, con el PSOE en Murcia y con la corrupción del PRC en Cantabria. Y eso les parece romper la política de bloques«.

«Yo no sé muy bien en qué bloque estamos nosotros. Lo que sé es que estamos en una posición de distancia infinita con el PSOE. No con el zapaterismo o el sanchismo, con el PSOE. Porque algunos prometen derogar el zapaterismo y cuando llegan, no derogan nada. Ahora prometen derogar el sanchismo y no se atreven ni a derogar los deshechos del sanchismo y del zapaterismo, es decir, del socialismo. Ni siquiera en las regiones en las que gobiernan. Por eso me resisto un poco a este planteamiento de los bloques», señalaba Abascal.

En su entrevista en El Debate, Abascal cree que «Vox hace un planteamiento claro en defensa de España, se atreve a llamar a España patria, a recuperar un vocabulario que querían proscribir. Se atreve a defender planteamientos que responden a los sentimientos más profundos de los españoles, a los valores que han aprendido en sus casas. Eso no solo es razonamiento, es pura emoción. Esa política de la emoción que algunos quieren denostar, que creen que tiene que estar fuera del debate público, la ha incorporado Vox al debate público de ese supuesto bloque, porque los otros no estaban dispuestos. Es más, nos lo afean».

Sobre la ficticia polémica generada en las últimas semanas con la ley de violencia de género, Abascal deja claro que en Vox «creemos que hay una violencia intrafamiliar, a veces una violencia doméstica -porque no es perpetrada por miembros de la familia, sino que puede serlo por cuidadores- en la que hay grupos más vulnerables, como las mujeres, los niños y los ancianos. Y creemos que eso hay que combatirlo. Es más. Somos el partido que lo combate con más claridad, que pide penas más duras«.

En este sentido indica que «nos oponemos frontalmente a una ley de violencia de género que solo sirve para criminalizar al hombre, que no ha servido para reducir las agresiones a mujeres y los asesinatos de mujeres y que tiene como único objetivo la lucha de sexos.

Sobre la polémica generada estos días con esta cuestión, Abascal deja claro que en Vox «tenemos un problema con la manipulación del discurso de Vox por parte de los medios de comunicación que obedecen a la izquierda y que a veces recibe el seguidismo del PP, que durante estos días se ha dedicado a demonizar a Vox con las mismas calumnias de la izquierda contra nosotros. ¿Cómo te pones a demonizar a aquel con el que estás condenado a entenderte? Ellos sabrán, pero nosotros no vamos a cambiar nuestro discurso.