La entidad española estudia el despido de 8.291 personas, junto con el cierre de 1.534 oficinas, suponiendo así la mayor reestructuración de la historia, experimentada por un banco español.
Por un lado, el banco ha descartado posibles prejubilaciones e informaba de que las salidas se llevarán a cabo basándose , entre otras cosas en la meritocracia. Se valorará también la trayectoria y experiencia en la empresa , para determinar quiénes dejarán de formar parte de la misma.
Caixabank tratará de que estas salidas sólo afecten al 50% de los trabajadores mayores de 50 años, y que el porcentaje restante recaiga en los menores de dicha edad. En cuánto a los despidos, se realizarán en sucursales (5.742), servicios centrales (1.611), filiales (688), direcciones territoriales (250).
En relación a las indemnizaciones, existirán cuatro diferentes, en función de la antigüedad. Los mayores de 63 años, obtendrán 20 días por año trabajado con un tope de 12 mensualidades. El rango de edad situado entre los 57 y los 63, con más de 15 años trabajados en la empresa, recibirá la mitad del salario pensionable con descuento del desempleo y pago del convenio de la Seguridad Social. A los que tengan entre 55 y 58 años, y también más de 15 años trabajados, se les trasladará el 50% del salario regulador con máximo de dos anualidades. Para los colectivos restantes, se les aplicarían 25 días por año trabajado con un tope de 18 mensualidades.
Sobre los despidos, cabe recordar, que llegan como resultado de la fusión con Bankia, quién absorcía la entidad. Además Caixabank ha explicado a los sindicatos las causas (organizativas y económicas) del ERE , y se ha comprometido a buscar «lo más rápido posible» nuevos empleos a todos los trabajadores que se verán afectados, por esta medida.