Escondida, en un lugar desconocido, seguramente en una habitación oscura, recibió María Corina Machado la gran noticia de ser designada Premio Nobel de la Paz.
Con todo merecimiento, esta mujer valiente y valiosa, líder de la oposición a la dictadura Venezolana, ha recibido la noticia de tal alta designación.
Es un premio, en realidad, a la lucha por las libertades y al propio pueblo de Venezuela, que sigue resistiendo a pesar de sufrir una tremenda persecución.
Este galardón, supone un respaldo muy importante para seguir luchando por la recuperación de la democracia en un momento en el que la dictadura de Maduro se tambalea.
Es un premio también de manera fundamental, a aquellos que se encuentran detenidos en el edificio del Helicoide, donde se tortura de manera cruel y donde los detenidos sufren todo tipo de padecimientos por parte de un Gobierno que debiera de ser juzgado por sus crímenes y por haber usurpado la libertad a millones de Venezolanos.
Llama la atención como la actual izquierda en el poder en nuestro país, ha recibido la otorgación de este premio a María Corina Machado, su silencio cómplice el del Gobierno, y las declaraciones de la izquierda comunista, sólo demuestran que estas ideologías no tienen nada positivo que ofrecer a la sociedad, sólo prohibiciones, división, dolor y todo aquello que crispa y enfrenta.
Sin duda , los que creemos en la libertad debemos hoy estar más contentos.
