Denigrante, vergonzoso y síntoma de una sociedad enferma. Resulta, que el Gobierno vasco, utiliza el euskera para negociar con los sindicatos de prisiones en la negociación de estos funcionarios al pasar ahora a depender de la administración del País Vasco, según ha recogido ABC.
Es imposible encontrar más discriminación, sobre un colectivo de unos 700 funcionarios, que en su mayoría no hablan euskera.
Parece ser, que el objetivo de la administración vasca, es dar un plazo para estudiar euskera, una dificultad más para que puedan pasar a depender de la administración vasca y así opten por elegir en otra Comunidad.
Este tipo de noticias, muestran el despropósito que ha creado el estado de la autonomías, al no existir lealtad alguna por parte de ciertas Comunidades.
Una deriva más, de la “locura” nacionalista, de consecuencias lamentables para nuestra convivencia.
Para los nacionalismos, los idiomas no son para entenderse, sino para dividir, crispar y separar, no saben otra cosa, aunque conociendo la historia y los orígenes del nacionalismo vasco, se puede entender todo ello muy bie: no se pude pedir al que no quiere dar y sólo confrontar.