Aquel voto frustrado, por otros militantes, socialistas que vieron como se intentaba votar en aquella reunión de forma ilegal y según algunas fuentes intentando manipular, ya dejó al descubierto de lo que era capaz, Pedro Sánchez, por tener el poder y por controlar toda opinión contraria o crítica.
Lo que ocurre ahora con el intento de control de la justicia y la modificación de las penas sobre el delito de sedición, es algo de tanta gravedad que el sistema judicial español, debe de pararlo y los partidos de la oposición, no debieran descansar hasta que se pare tales atentados a la división de poderes, al juicio responsable y al bien común de la convivencia de los españoles.
El Presidente de Gobierno, pronóstico no tendrá, antes o después, un buen final en su vida política, a pesar de que cuenta con apoyos importantes, es tanto el daño que está haciendo a la convivencia, que su actuación será una carga.
Su relación con Soros, debe de preocupar a los que creen en el estado de derecho.
Soros, está dedicando en todo el mundo cientos de millones a influir en la vida política de países soberanos, por ello tiene prohibida su entrada en algunos países y es el mayor donante del Partido Demócrata de Estados Unidos.
Sus ideas, son contrarias a la libertad y sólo desde la fortaleza se las puede hacer frente.
Aquellos, que en la presente situación callan o miran hacia otro lado, esta cayendo en una grave irresponsabilidad, se trata de nuestras libertades, de nuestra convivencia y de la defensa de la nación de sus enemigos, de aquellos, que quieren destruirla.
El mayor partido de la oposición, el PP, no puede quedarse sólo en un recurso de inconstitucionalidad, ni en decir que cuando llegue al poder cambiará todas esta leyes tóxicas, debe de actuar ahora y buscar estrategia legales y movilizar instituciones y personas para frenar este desvarío, incluyendo a los socialistas de bien, así como presentar una moción de censura que paralice al menos un tiempo el proceso para que llegue a la opinión pública lo que está sucediendo de verdad, dado que una parte de los medios de comunicación en una actuación desleal e impropia de un estado democrático, ocultan o tergiversan la gravedad de la situación.
La democracia es un bien de todos, no es un sistema perfecto, pero es el mejor de los sistemas, todos debemos de preservarlo para preservar nuestras libertades y derechos y no hacerlo es un traición.