He escuchado con interés, el discurso de investidura, del candidato a Presidente, señor Núñez Feijoo y tengo que decir que me ha sorprendido muy gratamente.
Un discurso muy bien armado, fácil de entender por cualquier persona de bien, lleno de propuestas muy necesarias y que si se escucha sin “pasión”, es transversal, aunque recuperando principios que el PP siempre debiera de reivindicar y que ha dejado claros, como la libertad individual, la defensa de la clase media y trabajadora y la gran apuesta por las ayudas a las familias.
La defensa de la independencia del poder judicial, anunciando sus disposición clara a que los políticos dejen de inmiscuirse, ha sido otro aspecto muy destacado.
Ha presentado una acción de gobierno, de concordia y libertad y de rechazo a que los programas políticos se entrometan en la vida de las personas, sobre lo que tienen que sentir pensar y como tienen que actuar.
También hay que destacar, la claridad de hacer compatible la defensa del medio ambiente y el desarrollo, rechazando políticas extremistas medioambientales al respecto.
En definitiva, alguien en el PP, parece haberse dado cuenta, que sus votantes y simpatizantes y creo que una mayoría social está por la defensa del sentido común y los valores, lejos de continuas imposiciones, la acción de Gobierno presentada por el señor Feijoo en su oferta, es claramente la de el “sentido común” y la unidad, pero con claridad de ideas fundamentales de un partido que debe defender ante todo la libertad y prosperidad.