Nuestra libertad está en serio peligro. El Ministerio del Interior del señor Marlaska, se quiere introducir en nuestras vidas, en lo que es un control similar, al que se produce en países totalitarios como China.
El sector hostelero y las empresas de alquiler de vehículos, se han revelado y harán llegar al Ministerio del Interior su sonora protesta por el intento del Gobierno de conocer lo datos privados de los huéspedes de un hotel o de las personas que utilizan un vehículo de alquiler.
Quieren solicitar el número de móvil de los viajeros, si el pago es en efectivo o con tarjeta, su dirección personal.
En definitiva, no sólo los datos que siempre, se han solicitado del DNI o pasaporte, sino datos de índole privado.
Es decir, crear una especie de «gulag» para el control de lo que hacemos, de cómo vivimos y sentimos.
En un país donde entran diariamente, por inacción del Gobierno miles de ilegales, se quiere controlar nuestras vidas y haciendas, mientras miles de indocumentados, de los que no sabemos nada, campan a sus anchas sin control alguno.
Desde luego, es una medida inconstitucional, propia de personas con tendencias totalitarias y que hay que combatir, llevando al Tribunal Constitucional la cuestión, y a cualquier tribunal internacional. en caso de ser desestimada la medida.
¿Para qué sirve la democracia, si los gobernantes se inmiscuyen en nuestras vidas?.