El técnico del Racing, Aritz Solabarrieta, era de nuevo protagonista, esta vez en la rueda de prensa correspondiente al partido celebrado en los Campos de Sport frente al Ebro (1-3). Siendo la última comparecencia del entrenador vasco, se esperaba un balance de la temporada, al que añadió una serie de aclaraciones.
En primer lugar, arrancaba lamentando la recta final de la temporada, dónde el haber conseguido clasificarse a la Primera RFEF, y el no tener ya ningún tipo de aspiración les ha hecho estar lejos de su mejor versión. Pese a ello, sacaba pecho reiterando que existían dos objetivos «estar en la PRO y sacar chavales. Y eso se ha conseguido», dejando entrever que nadie le habló de ascenso.
Siguiendo en esta línea señalaba que «hemos sido el mejor equipo de la Segunda División B, en la segunda vuelta, y a eso hay que darle valor», y que a pesar de los grandes resultados cosechados en esas fechas, «no fue suficiente para clasificarnos entre los tres primeros».
Continuando con el repaso de su experiencia en Santander, Solabarrieta retrocedía hasta el día de su llegada, dónde se reunía con José María Amorrortu, Pedro Menéndez y Pedro Ortiz, para aclarar que «él me dijo como y con quién tenía que jugar » en referencia a Ortiz (vicepresidente del Racing). «Ahí me di cuenta de todo lo que conlleva este club», añadía.
Sobre las tres primeras derrotas tras su llegada al club, el técnico vasco explicaba que desde ese momento quedó «crucificado», aludiendo que «desde ese día, yo ya no tengo más margen».
Finalmente se mostraba «afortunado» por haber podido entrenar a estos jugadores, y daba las gracias a los trabajadores y miembros del club, de los que decía «tener solo buenas palabras», y a los que les desea un buen futuro. Aprovechaba también para «desear lo mejor» al nuevo entrenador y proyecto, que está fraguándose de cara a la temporada 21/22.
COMUNICADO DEL RACING
Una vez llevada a cabo esta controvertida rueda de prensa, el gabinete de comunicación del Racing lanzaba un comunicado en el que matizaba y corregía algunas declaraciones de Solabarrieta, «negando categóricamente» que se haya incidido en sus labores como técnico de la entidad.
Desde el club explicaban que estos mensajes «pueden tener como objetivo desviar la atención sobre sus números al frente del banquillo del Racing, que han resultado insuficientes para obtener la clasificación para el play off de ascenso a Segunda (siete derrotas en 19 partidos)».
Concluían expresando su lamento por verse obligados a «tener que aclarar las declaraciones de Aritz Solabarrieta en un día triste, pues acaba de concluir una temporada decepcionante para todo el racinguismo (club, plantilla, afición), que aspiraba a cotas mayores al inicio del curso».