El Grupo PITMA, dueño de las acciones del Racing y ende su presidente, Alfredo Pérez, decían ayer mantener de nuevo en el puesto al entrenador Aritz Solabarrieta a pesar de los malos resultados que ha cosechado el el técnico desde su llegada con tres derrotas Real Sociedad B, Amorebieta, Real Unión) un empate en casa (Bilbao Ath.) y una sólo victoria (Portugalete), es decir de 15 puntos posibles tan sólo 4, que tiene al equipo en una situación que puede quedarse la temporada que viene sin esta en la super liga de Segunda b.
El director de estrategia deportiva del club, José María Amorrortu, lograba de nuevo convencer a Alfredo Pérez y Pedro Ortiz, para que mantuvieran en el puesto a su «protegido» a pesar de la voces en contra que había dentro del propio Consejo de Administración del Racing que pedía su destitución.
Lo cierto es que otros entrenadores con estos resultados en otros momentos ya habían sido destituidos, incluso estando más arriba en la clasificación de lo que ahora está el conjunto racinguista, como Ángel Viadero que fue cesado siendo tercero, ni Rozada con 11 puntos en siete partidos o el propio Pedro Munitis que presentó su dimisión después de cuatro partidos del Play off seguidos perdiendo.
El domingo a las 12,00 h. hay una nueva prueba de fuego para el Racing y para Solabarrieta en el encuentro que le va a medir en Vitoria al Alavés B, donde una derrota supondría decir casi adiós a la Fase de Ascenso y pondría muy complicado ser tercero, plaza que da opción a jugar la próxima temporada en la nueva Primera REFE.