Reportaje de: Diego Lavín y Pedro Martínez
El mundo del toreo, al igual que en la gran mayoría de los sectores económicos actuales, atraviesa una situación límite, en la que los recursos no son suficientes para hacer frente a los gastos, y dónde la palabra «incertidumbre» es la que mejor define el panorama a día de hoy.
La celebración de este espectáculo trae consigo la movilización de un gran número de personas, que hacen posible que todos los años, las corridas en las plazas de España, sean una realidad y todo un ejemplo de realización de un gran evento.
Toreros, ganaderos, y todos y cada uno de los trabajadores que viven del arte de la tauromaquia, experimentan un momento complicado, ya que con la pandemia como protagonista, sus faenas han pasado a tener un papel testimonial.
La reciente corrida celebra en Madrid, es para ellos, sin lugar a dudas, un hilo de esperanzas al que agarrarse, y del que esperan que sea el inicio de un gran verano, mucho más satisfactorio y con mayor actividad, que el vivido el pasado año.
Una voz autorizada dentro de las plazas es Rafael Tejada, portavoz de la Plataforma Toro Bravo Andaluz, quien destacaba, en primer lugar, el «desastre» económico que atraviesan, transmitiendo que «la situación de la cabaña brava en Andalucía, es el reflejo de la cabaña brava a nivel nacional, dónde la pandemia ha provocado una pérdida de valor del 90% del producto«.
Tejada expresaba su lamento ante el contexto actual, en el que «muchos ganaderos han visto como sus sueños se quedaban por el camino, al no poder hacer frente a los pagos relacionados con el mantenimiento de sus fincas y animales».
Por otro lado, recordaba la gran labor que han realizado durante estos meses marcados por la Covid-19, destacando entre otras decisiones, el establecimiento de la plataforma del Toro Bravo de Andalucía, a dónde se adhirieron todos los pertenecientes al sector, con el objetivo de que las Administraciones «tomen nota de su situación», a través de un exhaustivo informe, dónde recogían las pérdidas sufridas, las cuales ascienden a más de 30 millones de euros.
En relación a las ayudas, el portavoz informaba de que desde la Junta de Andalucía recibirán 4 millones de euros, los que espera que supongan un «balón de oxígeno» para los pertenecientes al sector de la ganadería, haciéndoles además «recuperar en parte, la ilusión perdida durante este periodo de excepción».
Aprovechaba también para reiterar, que la no celebración de este espectáculo en las plazas, supone para los «que crían al toro, que al fin y al cabo es el protagonista, unos gastos inasumibles» . En ámbitos numéricos, el llevar al animal, en perfectas condiciones, supone una inversión de 5.000 euros , y la actual salida del mismo, que pasa por la venta en valor de carne, oscila los 500 euros.
Además, lamentaba nuevamente que «desde hace años ciertas formaciones políticas se hayan mostrado en desacuerdo con este arte, lo que ha provocado que los que forman parte de él, hayan tenido que rebajar sus honorarios, para poder continuar con el festejo», ya que desde las administraciones «no se otorga el mismo protagonismo, ni las mismas ayudas, que en épocas pasadas».
Aclaraba, que desde su posición no se defienden partidos políticos , sino que se «defienden ideas», por lo que celebraba la victoria de Isabel Díaz Ayuso en Madrid, «porque la líder del PP mantiene la festividad del toreo como cultura».
En cuánto a las expectativas puestas en el verano del 2021, Tejada calificaba como «positivo» que ya «se vayan calentando los motores en las plazas», y confiaba en que el Gobierno «poco a poco vaya relajando las restricciones en ellas».
Por último, al ser preguntando sobre las posibles peticiones que podrían solicitar al Gobierno actual, aludía que «es fundamental normalizar la figura del toro bravo en la sociedad, y explicar cual es su importancia medioambiental», estableciendo como ejemplo el mantenimiento de los ecosistemas, o la cuida de la flora y de la fauna. «Es necesario que el toro deje de ser la «oveja negra», y pueda optar a los programas de ayuda que provienen de la Unión Europea», concluía.