La portavoz del Grupo Municipal VOX en el Ayuntamiento de Santander, Laura Velasco, ha lamentado “la falta de un discurso coherente del equipo de Gobierno” tras los primeros pasos dados para la implantación de la Zona de Bajas Emisiones en la ciudad.
Así lo ha indicado la concejal en un comunicado tras conocer que el equipo de Gobierno ha aprobado licitar la plataforma de gestión y control de la ZBE que se suma a la instalación de las nuevas estaciones de calidad del aire en Santander.
“El Partido Popular sigue dando pasos para imponer este proyecto totalitario que pretende acabar con la libertad de circulación y ejecutar las políticas progres y globalistas en materia de movilidad”, ha denunciado.
“Son pasos a ciegas, y sin conocer datos objetivos de las emisiones, pues los sensores recién instalados, no han dado resultados todavía”, recuerda.
En este sentido, Velasco afirma que “las familias de clase media y trabajadoras serán las que se vean más afectadas, ya que no pueden permitirse adquirir un vehículo eléctrico de 70.000 euros”.
“También se verán afectadas las furgonetas de reparto que en muchos casos tampoco podrán acceder al centro de la ciudad y por lo tanto se estará destruyendo empleo, algo que Santander no se puede permitir”, matiza.
Para la portavoz municipal de VOX, “si el PP verdaderamente quiere cuidar y proteger el comercio no puede apostar por cerrar el centro a la circulación, pues será la puntilla de un sector tan castigado”.
Asimismo, la edil lamenta “el doble juego del PP”, ya que “un día nos dicen que no implantará la ZBE y otros comprobamos cómo avanzan en su ejecución”.
“Exigimos al equipo de Gobierno que sea valiente, que se desmarque de la agenda progre y vele por el bienestar y el progreso de los vecinos y el tejido comercial, máxime cuando Santander no es una ciudad contaminada”.
Por último, Velasco ha sentenciado que “nos entristece como la alcaldesa y sus concejales toman decisiones a espaldas de los vecinos, demostrando que no les importan y que lo único que les interesa es seguir imponiendo la agenda progre de los burócratas de Bruselas como ha sido la peatonalización de calles o la Ciudad 30”.