Los transportistas cántabros secundan este miércoles el tercer día del paro indefinido convocado por la escalada de precios de los carburantes, jornada en la que se han registrado algunos “incidentes aislados” con camiones dedicados a la recogida de leche en la región, debido a “gente que anda por ahí, actuando por la noche a su aire”.
El presidente de la Asociación de Empresarios del Transporte en Cantabria, José Andrés Cianca a la patronal cántabra le consta que “muchas” otras empresas no asociadas se están uniendo a la causa, pues comparten “el mismo problema” y padecen igualmente la “imposibilidad” de repercutir los costes de los carburantes a sus clientes.
Con todo, el portavoz de Asemtrasan ha evidenciado que el descenso de la actividad en el sector afecta al suministro de productos en centros logísticos y otras superficies.
Por otro lado, el colectivo condena los “boicots” a los camiones encargados de la recogida de leche en la comunidad autónoma por parte de personas que “poco tienen que ver” con la patronal, que rechaza estas acciones.
“No es la solución. Aquí se trata de buscar soluciones y no de generar problemas a compañeros”, ha considerado Cianca, que ha agradecido al respecto la labor de protección a estos profesionales del sector desarrollada por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
En este sentido, ha indicado que Asemtrasan decidió el sábado -y refrendó el lunes en asamblea- que como “excepción” se permitiera prestar el servicio de recogida láctea y transporte de otros productos relacionados con el sector, como el de reparto de comida a los animales -piensos, forrajes, etc- para no “trasladar el problema” de los transportistas a los ganaderos y teniendo además en cuenta “la situación que están pasando ellos”.
Y también se acordó continuar con la distribución de medicamentos y material médico y sanitario a hospitales y otros centros de salud, al ser una actividad que “no puede parar”.
De momento, el paro indefinido continuará con la vista puesta en la reunión del Ministerio con la patronal este miércoles, y hasta que el Gobierno central ponga sobre la mesa “medidas oportunas” para paliar la situación por la que atraviesa el sector del transporte por el auge de los precios de los carburantes.
LA PESCA PARA HASTA EL LUNES
La totalidad de la flota cántabra permanecerá amarrada a puerto hasta el próximo lunes, 21 de marzo, por el «inasumible» precio del gasóleo.
Así, seguirán sin salir a faenar los barcos de cerco, de la región y de todo el Cantábrico-Noroeste, como ya hicieron el lunes los cerca de 160 buques que la conforman. Y ahora se han sumado los de otras artes de la comunidad autónoma, unos 80 más, y que continúan en cambio con su actividad en otros territorios, caso por ejemplo del País Vasco.
Los pescadores cántabros están a la espera de la conferencia sectorial de este miércoles en la que se abordarán los problemas y demandas del sector. Después, se volverán a reunir el viernes, día 18, para analizar la situación y decidir en función de la misma si mantienen el paro la semana que viene o no.
Pero hasta el lunes no van a salir a la mar ni los barcos de cerco -centrados ahora en la pesquería del bocarte- ni los de otras artes -como los dedicados al verdel-, según han acordado por «unanimidad».