Santoña, abandonará esta media noche el confinamiento al que se le impuso la localidad cántabra por parte del Gobierno de Cantabria el pasado día 2 de septiembre con motivo del aumento de las personas contagiadas por COVID-19 que estaban teniendo.

Así lo ha publicado hoy el Boletín Oficial de Cantabria (B0C) que establece el levantamiento del confinamiento a partir de las 00,00 horas de esta media noche, con lo cual se volverá a poder salir a la calle con total normalidad la vez que salir y entrar de la localidad santoñesa, aunque se mantienen algunas limitaciones sobre aforos y reuniones durante otros 14 días, prorrogables en función de la evolución de los contagios.

En texto de BOE se señala que «dadas las dificultades de rastreo y el potencial diseminador de los diferentes ámbitos y actividades» se considera «necesario, por razones de salud pública», mantener algunas limitaciones, aunque en «un menor nivel de restricción» que las mantenidas durante el confinamiento.

La hostería y la restauración podrán abrir al 50% las barras del interior de los establecimientos y el 75% de sus terrazas, con distancia de 2 metros entre sí y «uso permanente de mascarilla, salvo durante el acto de beber y comer».

Por su parte bares y cafeterías tendrán que mantener fuera de suso sus barras de forma temporal, mientras que las zonas comunes de los hoteles podrán usarse al 50%.

Las actividades físicas se podrán llevar a cabo con limitaciones, con la mitad del aforo y una distancia de 4 metros cuadrados por participantes y «evitando el contacto físico».

En bodas, comuniones, bautizos, velatorios, funerales, entierros y oficios religiosos, podrán concentrarse un máximo de 20 personas por evento.

Lo cierto es que los vecinos están molestos e indignados por haberles llevado a esta situación por parte del Gobierno Regional y como muestra de ellos fueron las protestas vividas en la población al entender que no había un motivo claro para llevarles a esa situación de confinamiento y que ha supuesto un golpe económico importante para los comerciantes que tienen dudas de cómo se van a recuperar de ello.